AKTUALITATEA

Economia | 2023-02-06

La propuesta ha sido presentada mediante una rueda de prensa en la que han tomado la palabra Izar Hernando, Secretaria de Juventud, y Eraitz Saez de Egilaz, parlamentaria. En ella han presentado dos medidas de inmediato cumplimiento para revertir la situación actual.

IZAR HERNANDO_CASTELLANO

A día de hoy, la tasa de emancipación juvenil no refleja la necesidad vital que tiene la juventud para emanciparse. Los datos también muestran que la situación es más grave de lo que parece. La edad de emancipación en Euskal Herria ronda los 30 años y no hay ningún atisbo de que esta vaya a menguar. La realidad por lo tanto es clara: las jóvenes cada vez tenemos más dificultades a la hora de emanciparnos y cada vez tardamos más en conseguir irnos de casa de nuestros padres.

Emancipación

Ante esta situación queremos subrayar que emanciparse no consiste simplemente en encontrar otro “techo” o en irse de casa tus tutores legales. Necesitamos poder emanciparnos de manera real para poder desarrollar nuestros procesos vitales bajo nuestras propias decisiones, y eso exige tener formal y material para emanciparse.

La emancipación un camino lleno de trabas

Bajo la lógica capitalista actual, la emancipación está totalmente subordinada al salario y al poder económico de la familia. El mercado es el único que manda. Por un lado, las jóvenes tenemos que destinar de media el 80% de nuestro salario para pagar una vivienda. Los precios desorbitados y el haber convertido este derecho fundamental en negocio, impiden cualquier posibilidad de emancipación real.

Por otro lado, partiendo desde esa carencia, la mayoría de jóvenes depende de la capacidad económica de sus familias para emanciparse y por lo tanto, muchos, no consiguen hacerlo. En el caso de las familias con menos recursos o de las jóvenes sin referentes familiares, la emancipación es prácticamente imposible. Además, esta situación conlleva que haya tan solo un único modelo de emancipación.

Ante ello, necesitamos la capacidad real de desarrollar nuestros procesos vitales bajo nuestras decisiones, tomando cada cual su propio camino

Opción a vivir en nuestros pueblos y comarcas, enraizadas en la comunidad

Por desgracia, el problema no termina ahí. SI el camino para la emancipación es por sí difícil, parece, que quieren convertir en caro privilegio el hecho de poder emanciparnos en nuestros pueblos o barrios, poniendo patas arriba el proceso vital natural de todas las personas jóvenes.

Pero al contrario. Poder envejecer en nuestros pueblos, barrios y comarcas debería ser un derecho, y debemos construir condiciones para que podamos desarrollar nuestras vidas en nuestros entornos. Nuestros pueblos, nuestros barrios, son nuestros espacios seguros y accesibles, los que nosotras mismas elegimos. Esto no es un capricho aunque así lo piense el alcalde de Donosti Eneko Goia. La clave está en construir opciones reales para vivir en nuestros entornos, para poder cuidarlos y conocerlos. Asentar las bases para crear y promover la comunidad. La emancipación también trata de eso.

 

ERAITZ SAEZ DE EGILAZ_CASTELLANO

NUESTRAS ALTERNATIVAS Y PROPUESTAS

Hoy por hoy, no se garantiza una emancipación juvenil digna. ¿Y cuál es la respuesta que dan ante esto las instituciones públicas? Hemos visto que cuando se desarrollan políticas públicas de emancipación juvenil, se hace desde la mera necesidad de salvar el bache y sin ningún tipo de perspectiva de futuro; sin la más mínima intención de revertir esta situación. En vez de atajar el problema desde la raíz y buscar soluciones estructurales, solo toman medidas coyunturales; cuando las toman claro. Así tenemos que ver como unas ayudas supuestamente destinadas a fomentar nuestra emancipación acaban, aunque sea de manera indirecta, en los bolsillos de los propietarios. Contribuyendo de este modo a inflar la burbuja inmobiliaria actual y permitiendo que se mantengan los precios abusivos.

Si queremos hablar de emancipación, con mayúsculas, tenemos que ampliar el espectro y entender de verdad que necesitamos para afrontar una emancipación real. Dejar de lado la lógica especulativa y neoliberal, y hacer política, con todas las letras. Poniendo a la juventud en el centro, y revirtiendo la asfixiante situación actual de la vivienda.

Teniendo en cuenta el contexto y los objetivos con los que partimos, y con la firme ambición de revertir esta situación, desde EH Bildu vemos totalmente necesario adoptar las siguientes medidas. Porque las instituciones y los organismos públicos no pueden seguir mirando hacia otro lado ante las necesidades reales de la juventud, ni fomentando ayudas vacías que no traen una emancipación real, ante la falta de capacidad de gestionar la situación.

Dicho esto, EH Bildu propone las siguientes medidas dirigidas al empleo y la vivienda que han de ser aplicadas de inmediato por las instituciones correspondientes, con el objetivo de materializar nuestro derecho a vivir en nuestros pueblos y ciudades.

1.- Teniendo en cuenta la precariedad laboral que sufre la juventud, las instituciones y organismos públicos han de tomar el compromiso de revertir esta precariedad y no fomentarla, para ello:

            - Siguiendo las directrices de la Carta Social Europea, fomentar un salario mínimo propio de 1.400euros.

            - Revisar los planes, programas e incentivos dirigidos a fomentar el empleo juvenil, suspendiendo aquellos que han valido para fomentar condiciones de trabajo precarias y asegurando las siguientes condiciones: un salario mínimo de 1.400 euros, contratos permanentes y de jornada completa.

2.- Trabajar en el ámbito de la vivienda basándose en el objetivo de la juventud de desarrollar un proceso vital bajo un alquiler y ligados y ligadas a una comunidad:

            - Poner un tope a los alquileres del mercado privado.

            - Tomar medidas concretas e inmediatas para que una pueda vivir en su entorno sin tener que destinar más del 30% de su sueldo a pagar el alquiler.

            - Ampliar el parque público de viviendas para que este sea eficaz y accesible, desarrollando el derecho de prioridad de la administración para adquirir viviendas y poniendo en el mercado aquellas que estén vacías.

Esta situación es insostenible. No podemos seguir en esta espera eterna. Tenemos que entender que el futuro empieza hoy. Necesitamos respuestas, también desde las instituciones públicas. Para que la emancipación sea real, para garantizar que la juventud tenga vida dignas, y para vivir enraizadas en nuestras comunidades, queremos trabajar y vivir en nuestros pueblos, barrios y ciudades. Ya va siendo hora de que las necesidades de la juventud estén en primera línea de la agenda política. EH Bildu, tiene claro que esto tiene que ser una prioridad.