Declaraciones de Pello Otxandiano:
Hoy rememoramos un momento histórico en el proceso de institucionalización de esta parte del país, coincidiendo con el 45º aniversario de la puesta en marcha del Parlamento Vasco.
Lo primero que queremos destacar es que hablamos de una parte del país. Este país tiene siete territorios históricos, y su proceso de institucionalización ha sido diverso, avanzando a distintos ritmos. En lo que respecta a los tres territorios históricos que conforman esta parte del país, hoy conmemoramos un hito fundamental: la puesta en marcha del Parlamento en 1980. Se trata, por tanto, de un momento clave en el desarrollo institucional de esta región.
Durante los últimos 45 años, esta parte del país se ha construido y ha llegado viva hasta este nuevo ciclo del siglo XXI, un periodo lleno de incertidumbres en un mundo en transformación. Esto ha sido posible gracias al compromiso de muchas mujeres y hombres que han contribuido a la construcción nacional de este país de diversas maneras. La acción del sistema institucional ha sido fundamental en este proceso, pero también lo ha sido la implicación militante de tantas personas a través de la autoorganización comunitaria, la movilización colectiva y otras formas de participación activa. En definitiva, el esfuerzo de múltiples generaciones ha permitido mantener viva la llama de esta pequeña nación.
Hoy nos encontramos en un nuevo momento histórico, ante nuevos retos sociales y económicos. Durante el acto, Mikel Urdangarin ha señalado algo que consideramos esencial: esta nación es frágil. Para afrontar los desafíos que tenemos por delante, necesitamos nuevas herramientas jurídicas y políticas que nos permitan proteger y fortalecer el país, garantizando la continuidad de su proceso de construcción nacional e institucionalización.
Para ello, es imprescindible dar un salto político, lo que implica alcanzar un nuevo estatus jurídico y político para esta parte del país. Pero también es fundamental que el proceso de institucionalización de esta vieja nación avance en el resto de sus territorios históricos.
El mensaje que queremos transmitir hoy es claro: esta legislatura debe ser la del salto político. Debemos lograr un acuerdo sobre un nuevo estatus político que nos proporcione las garantías necesarias para que la fragilidad de nuestra nación deje de ser tal. Es el momento de recuperar nuestras capacidades políticas y de dotarnos de las herramientas adecuadas para afrontar los retos sociales y económicos que nos esperan.