AKTUALITATEA


| 2023-09-09 09:35:00

La gestión del Gobierno Municipal de Donostia para que el Basque Culinary Center (BCC) pueda abrir una nueva sede en el barrio de Gros, en la parcela de Manteo, nos ha generado muchas dudas desde sus inicios. Con el paso del tiempo, y según avanza el proceso, además, en lugar de aclarar ciertas cuestiones clave, las preguntas siguen surgiendo.

Han pasado varios meses desde que el Gobierno Municipal de Eneko Goia diera en concesión al BCC una parcela pública, lo que generó un enfado y una perplejidad que hoy resultan dificiles de negar. Especialmente, aunque no sólo, el desacuerdo es palpable entre la ciudadanía más próxima a la citada localización.

 

Existe un recurso que fue admitido a trámite, y las manifestaciones y otro tipo de protestas que cuestionan el proyecto y las formas son habituales. Mientras tanto, este Gobierno Municipal ha decidido mirar hacia otro lado, ha declinado abrir un debate público y hacer un ejercicio de transparencia. El intento para lograr un consenso ha sido nulo. La crítica que hacemos desde EH Bildu en ese sentido es firme. No se ha acertado en las formas, ni hay vocación de comunicar el proyecto ni en el seno del PNV ni en el seno del PSE. Siguen enrocados en sus formas caducas, sin atender la demanda ciudadana.

 

A pesar del tiempo transcurrido, queremos reiterar que si existe voluntad es posible lograr un acuerdo. Abrir el debate es necesario. Hay muchas preguntas por responder. Por ejemplo, no han explicado por qué el proyecto tiene que ubicarse justamente ahí y no en otra parcela de Donostia. Existen otras alternativas y muy interesantes. No conocemos cómo se tomó esta decisión y tampoco si se pusieron otras opciones sobre la mesa. Y esto también lo denunciamos: el Gobierno Municipal no ha tenido contacto alguno con la oposición. Es más, el informe jurídico que solicitamos no lo hemos recibido aún.

 

Ante esto, hemos presentado una interpelación al alcalde Eneko Goia para que responda a nuestras preguntas en comisión.

 

Entre otras cuestiones, tendrá que explicar por qué decidió que la nueva sede del BCC debe edificarse en esa parcela. ¿Por qué no ha aclarado qué otras opciones planteó, si es que llegó a plantearlas? ¿Cuáles fueron los criterios? ¿Por qué no se ha sugerido un espacio degradado, de forma que se impulse la regeneración de un barrio y su entorno?

 

Aparte de no dar explicaciones a la ciudadanía, tampoco lo hace con el resto de formaciones: los avances y el transcurso de las fases ligadas al proceso las conocemos a través de los medios de comunicación. ¿Es este el modelo? Nosotras decimos que no.

 

Creemos firmemente en que la participación y la transparencia son el camino, siempre apostaremos por esta fórmula. Decisiones de este calado han de tomarse pensando en el bien común, en el conjunto de Donostia y, sobre todo, contrastando la opinión de las vecinas y vecinos que viven cerca de la zona proyectada.