AKTUALITATEA


| 2021-07-01 10:13:00

¿Qué ha cambiado en una semana para PNV, PSE y Patricia Alonso retiren su propuesta?
EH Bildu no ha sido especialmente prolífica en redes ni comunicaciones en las últimas semanas, en relación a la polémica propuesta de liberación Patricia Alonso, apoyada por PNV y PSE en la Comisión de Administración Municipal y Personal del 23 de junio. Y es que ya apuntábamos en esa comisión que el foro para debatir sobre el tema y sobre todo, mostrar nuestra interpretación y posición política al respecto, era el pleno municipal. Lo ocurrido en Sopela en el último mes es extremadamente grave, se ha creado una gran alarma social y ello debe aclararse y debatirse en el foro público donde puede participar la ciudadanía, esto es, el pleno municipal. En este foro es donde ibamos a exponer todos nuestros argumentos como segunda fuerza de Sopela y primera de la oposición.

Ha sido un lavado de cara
Nos alegramos que se haya abortado este asunto, y esperamos que no se vuelva a presentar dicha propuesta. Dicho ésto, nos es indiferente que el PNV haya retirado el punto fuera del orden del día, en nuestra opinión, por la presión mediática de estos días. Ha sido un lavado de cara. Remarcamos la corresponsabilidad del PNV en los acontecimientos del último mes.

Queremos mostrar nuestra indignación
Lo ocurrido en el último mes atenta contra las buenas prácticas políticas municipales: es inaceptable, vergonzoso, indigno y sobre todo, nada serio. Y nos referrimos a los siguientes hechos: los supuestos problemas técnicos de la concejala Patricia Alonso, que han favorecido un pliego a 15+5 años (mínimo 4 legislaturas), sin ningún tipo de consenso y con el voto de calidad del alcalde; el hecho de que esa misma persona que tuvo problemas técnicos no haya firmado la impugnación al pleno presentada por EH Bildu, Elkarrekin Podemos y DB/TU (ello implica ratificar el resultado de una votación que vulnera el derecho de participación política y de libre emisión de voto de los concejales y que puede crear precedente); finalmente, la propuesta de liberación de Patricia Alonso, apoyada por PNV y PSE en Comisión. Todos estos hechos nos crean una sospecha razonable donde fundar una crítica política muy dura.

Patricia Alonso ha primado intereses personales sobre sus responsabilidades políticas
La actitud de la concejal que ha solicitado su liberación es inaceptable y de una gravedad excepcional. Por interes personales, altera gravemente la representación municipal democrática de
Sopela: lo que antes era PNV+PSE y EH BILDU+ELKARREKIN PODEMOS+DBTU pasa a ser, PNV+PSE+Patricia Alonso y en frente, la oposición. Una nueva configuración municipal ilegítima.

El PNV es corresponsable de lo sucedido
Todo ésto se podría haber gestionado de otra manera, tomar otras decisiones para eliminar así cualquier atisbo de sospecha. Se podría haber pospuesto la votación de los supuestos problemas
técnicos, para realizarla con total garantias, dada su importancia y falta de consenso. En su defecto, el PNV no debería haber apoyado la liberación de la concejala, y haberse opuesto a ella desde un principio.Todo ello nos crea sospechas y dudas razonables sobre lo ocurrido en este último mes: se ha tratado de alterar la configuración democrática de Sopela de manera ilegítima. El

PNV se ha valido de los interes personales de una concejala para llevar a cabo sus proyectos partidistas, eso sí, con una mayoría absoluta que de forma legítima no tiene. Podríamos hablar del desarrollo del sector de Abaro sin mejoras al mismo, del nuevo PGOU diseñado según el ideal urbanístico del PNV, la ciudad deportiva de Urko (mediante los pliegos a 15+5 años), el aparcamiento subterraneo de Jauregizar, etc. Es decir, pasar rodillo a la oposición, como ya hizo con la aprobación del vial de Osteiko, donde la aprobó en plena pandemia, con la ausencia en la votación por incompatibilidad de un concejal (el concejal de DBTU no pudo votar) y con el voto de calidad del Alcalde.

Pedimos la dimisión automática de Patricia Alonso
Teniendo en cuenta la actitud de la concejala Patricia Alonso en el último mes, los acontecimientos descritos y la propia comunicación de Elkarrekin Podemos, en la que se habla incluso de transfugüismo, lo lógico y en consecuencia sería que la propia interesada presentara su propia dimisión, por vergüenza política... que se fuera de la vida municipal de Sopela. Y así lo exigimos.

Pérdida de confianza con el PNV
El PNV es corresponsable de lo ocurrido, ha impulsado este clima municipal con sus decisiones interesadas y conscientes. ¿Es este estilo de gobernanza el que quiere impulsar en el Ayuntamiento, valiéndose de interes personales para impulsar proyectos partidistas sin consenso y pasando rodillo sobre la oposición?. Vemos dañada totalmente nuestra confianza en el PNV y ponemos en duda cualquier acuerdo, contacto o proyecto que tengamos en común. Nos referimos concretamente al acuerdo presupuestario 2020-2021 donde queríamos impusar proyectos estratégicos para Sopela que llevaban años bloqueados. No obstante, vamos a actuar con calma y seridad, y vamos a analizar con rigor el estado real de ese acuerdo presupuestario, valorarlo y a actuar en consecuencia.