AKTUALITATEA


| 2021-06-17 11:48:00

Con su negativa a admitir a trámite la proposición de ley de EH Bildu para la creación de una Oficina Anticorrupción, el PNV y el PSE han confirmado que no tienen voluntad de acabar con la corrupción, las tramas, el enchufismo, los cárteles, el clientelismo, las corruptelas y los tratos de favor. Como les ha dicho Josu Estarrona, “o estás en contra de la corrupción o en cierta medida eres connivente con ella permitiéndola y no adoptando medidas para erradicarla”. El PNV y el PSE no han querido ni siquiera debatir la propuesta, una actitud antiparlamentaria que empieza a ser costumbre en la Cámara de Gasteiz cuando alguna propuesta de EH Bildu incomoda a los socios de gobierno.

Estarrona ha defendido la necesidad de una Oficina Anticorrupción porque los mecanismos que hoy existen para investigar, perseguir y castigar las prácticas corruptas no son ni suficientes ni eficaces, tal y como acaba de quedar en evidencia con el caso del Cártel del Norte, en el que están implicadas las administraciones vascas e importantes empresas de consultoría.

El parlamentario de EH Bildu ha subrayado asimismo la incoherencia del Gobierno de Urkullu y de los dos partidos que lo sustentan, que hace dos años respaldaron admitir a trámite la misma propuesta de la coalición independentista y hoy en cambio han optado por bloquearla. Su cambio de criterio obedece, según Estarrona, a que en estos dos años se han conocido las sentencias del caso De Miguel, el mayor caso de corrupción en la CAV, que afecta a la cúpula del PNV en Araba, y del caso Balenciaga, con una condena de cuatro años de prisión para el exalcalde del PNV de Getaria, a lo que también hay que añadir el cártel de las consultoras, multadas por Competencia por repartirse contratos públicos. “Algunos creen que por ser cercano a un determinado partido político es normal tener ventaja a la hora de obtener subvenciones, contratos, licitaciones o empleos públicos, pero eso no es normal porque sea habitual, y no podemos aceptarlo como normal”.