AKTUALITATEA


| 2021-07-14 12:52:00

EH Bildu ha presentado en el Parlamento una proposición no de ley que insta al Departamento de Salud a reforzar la Atención Primaria, Epidemiología y los equipos de rastreo por ser esas áreas las que más están sufriendo la presión del virus en la actual fase de la pandemia. La coalición considera urgente adoptar esas medidas y ha trasladado su propuesta directamente a la consejera Gotzone Sagardui “con la esperanza de que la tome en consideración”.

Rebeka Ubera ha explicado que “gracias a la vacuna hemos entrado en otra fase y es hora de hacer las cosas de otra manera; algunos indicadores que hemos utilizado hasta ahora, como el número de camas ocupadas en las UCI, ya no van a ser tan importantes porque la presión del virus se va a notar sobre todo en la Atención Primaria, las unidades epidemiológicas y los equipos de rastreo. Esas son las áreas a reforzar especialmente para hacer frente a lo que nos viene, hacen falta medidas preventivas complementarias porque con la vacuna solo no es suficiente”.

La iniciativa de EH Bildu va en esa dirección, en base a tres puntos principales: “Primero, los indicadores utilizados hasta ahora no son suficientes en esta fase de la pandemia; hay que valorar otro tipo de indicadores para que las medidas a adoptar sean lo más eficaces posibles. ¿Qué indicadores? La presión asistencial en Atención Primaria (la relación entre el número de consultas presenciales y el número de médicos y médicas y/o enfermeras), el índice de bajas de profesionales sanitarios, el número de pruebas PCR al día en Atención Primaria y que la trazabilidad sea superior al 60%. Segundo, reforzar la Atención Primaria, las unidades epidemiológicas, los equipos de rastreo y el sistema de alerta. Y tercero, ofrecer contratos de un año al personal eventual de Osakidetza para reforzar el sistema público de salud. Asimismo, para reforzar especialmente la Atención Primaria y Epidemiología, planteamos trasladar a esas áreas personal sanitario y administrativo de otras unidades. Reforzar la Atención Primaria es urgente para sacarla del colapso y recuperar progresivamente las consultas presenciales”.

La parlamentaria independentista se ha confesado “preocupada porque la evolución de la pandemia es preocupante en las últimas semanas y no vemos que el Gobierno de Urkullu esté mostrando capacidad para cogerle la medida al problema”. Al respecto ha criticado que, “aunque los indicadores de que íbamos a peor eran evidentes cuando el LABI se reunió por última vez hace una semana, la única medida que tomó fue no tomar medidas”. A su juicio, “es sorprendente la capacidad que tiene este gobierno para eludir sus responsabilidades, para no tomar decisiones, para no moverse, como si pensara que los contagios van a bajar sin hacer nada. En lugar de tomar decisiones y medidas, el lehendakari volvió a endosar toda la responsabilidad a la ciudadanía”.

En esta línea, ha denunciado, “impresiona la improvisación permanente del Gobierno y su falta de capacidad para adelantarse al virus aun teniendo todos los indicadores encima de la mesa. Hace un mes advertimos a la consejera de Salud de los riesgos que entrañaba la variante Delta y planteamos la necesidad de medidas preventivas, pero nos respondió con displicencia, quitando importancia al tema porque, según dijo, la progresión de esta variante no era alarmante. Hoy, sin embargo, la variante Delta supone ya el 35-40% del total de contagios y el porcentaje va en aumento. Ahora bien, si hablamos de previsiones fallidas y planificaciones erróneas, la palma se la lleva el lehendakari, que la pasada semana anunció la aprobación del cuarto Plan Bizi Berri definiendo tres escenarios posibles y asegurando que ni en el peor de ellos contemplaba que la tasa de incidencia pasara de 300. Pues bien, han bastado solo cinco días para que esa tasa haya superado esa cifra y las previsiones de Urkullu hayan quedado totalmente desfasadas”.