EH Bildu ha votado en contra de las enmiendas a la totalidad presentadas contra el Proyecto de Ley de Educación porque, según ha explicado Ikoitz Arrese, “pretenden obviar el camino recorrido desde 2021”, que posibilitó la firma del Acuerdo Educativo, y “negar la posibilidad de aprobar una buena ley”. En contra de esas enmiendas, “en EH Bildu queremos dar una nueva oportunidad al debate, a tener una buena ley y a la transformación de nuestro sistema educativo, pero que nadie se equivoque, no de cualquier modo".
En este sentido, tras reiterar la voluntad de EH Bildu de “llevar el debate hasta el final para lograr una buena ley, clara y ambiciosa”, el parlamentario independentista ha asegurado que, “por responsabilidad, no apoyaremos ninguna ley que no responda a los retos que tiene la educación vasca, ninguna ley que responda a los equilibrios internos partidistas de este Gobierno” PNV-PSE. “No vamos a aceptar ningún veto, ni ningún planteamiento partidista ajeno al Acuerdo Educativo, ni tampoco una ley que traiga inseguridad jurídica y pedagógica”.
Arrese ha indicado que, siempre con el objetivo de llegar a acuerdos, “EH Bildu va a seguir actuando desde la lógica de un acuerdo de país para conseguir la ley que necesitamos para hacer posibles las transformaciones que precisa el sistema educativo”.
“La Ley de Educación no la entendemos fuera de esa lógica de acuerdos de país”, ha subrayado, y por ello se ha mostrado “muy preocupado” por el escenario que PNV y PSE han abierto con sus enmiendas parciales. “El PSE, el partido minoritario en el Gobierno, dice que EH Bildu sobra, que no pasa nada si se queda fuera del acuerdo final, y nadie le dice nada; nos preocupa que el PSE quiera a EH Bildu fuera de la ley y que el PNV parezca dispuesto a darle eso que le pide”. Por ello, el parlamentario soberanista ha acusado a los socios de gobierno de “haber cambiado las reglas de juego, condicionar a peor el proceso y hacer una gestión equivocada del Acuerdo Educativo”. Al respecto, ha criticado su incapacidad para dar una explicación unívoca de sus enmiendas que ponen el foco en los modelos lingüísticos, sus explicaciones contradictorias y la desautorización del consejero de Educación por parte del PSE.