AKTUALITATEA


| 2022-01-21 13:04:00

EH Bildu ha manifestado hoy su preocupación con la deriva que ha tomado la negociación entre los gobiernos vasco y español en relación con el traspaso del Ingreso Mínimo Vital (IMV) a pesar de que ya en 2020 ambas partes anunciaron un acuerdo al respecto. Nerea Kortajarena ha denunciado “el embrollo” en que han convertido este proceso, ya que “a día de hoy seguimos sin la transferencia y sin saber de qué se está hablando, si de la transferencia integral del IMV o de su mera gestión”. En este punto, la parlamentaria independentista ha advertido de que la transferencia debe hacerse “de forma íntegra”, tal y como acordó el Parlamento a iniciativa de EH Bildu.

Kortajarena ha subrayado que la Cámara “no reclamó la transferencia de la gestión, sino la transferencia íntegra del IMV, que no es lo mismo”. Según ha explicado al respecto, “reclamamos mantener aquí la competencia para diseñar nuestras políticas de protección, como lo hemos venido haciendo los últimos 30 años, y que el IMV pueda integrarse en nuestro Sistema de Garantía de ingresos. No se trata de poder gestionar aquí las políticas de protección diseñadas por Madrid, lo que subordinaría completamente la RGI al IMV, pasando a ser un complemento del IMV. Eso supondría la pérdida de una competencia y  nos convertiría en una simple sucursal de Madrid”.

La parlamentaria de EH Bildu ha exigido por ello a los gobiernos de Lakua y Madrid la transferencia integral y cuanto antes del IMV, y ha dejado claro que la coalición que Maddalen Iriarte encabeza en el Parlamento de Gasteiz “no va a aceptar menos que eso” porque es un paso clave “para reforzar nuestro sistema de garantía de ingresos de cara a hacer frente a la pobreza y la exclusión y avanzar en la cohesión social”.

Kortajarena ha advertido asimismo de las consecuencias de retrasar esta transferencia. “Está bloqueando y condicionando la reforma de la RGI y, yendo más allá, es una transferencia que podría considerarse la antesala de la transferencia de la Seguridad Social. Además, mientras sigue el tira y afloja, la situación es caótica en lo que es la gestión de los dos sistemas, de la RGI y del IMV, justo cuando las necesidades de las personas perceptoras son enormes”. En este sentido, Kortajarena ha aludido al último informe de la Fundación Foessa de Cáritas, cuyos datos “reflejan que las personas en situación de vulnerabilidad en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa están peor que antes de la pandemia y que la crisis de la Covid ha incrementado en un 50% el número de personas con necesidades materiales severas. Los datos no hacen sino confirmar que la seguridad vital de miles de personas y familias está patas arriba y que es sumamente importante contar con herramientas propias de protección que estén diseñadas tanto para atraer al sistema a las personas que hasta ahora quedaban fuera del mismo como para responder a las nuevas realidades y los nuevos sectores golpeados por la Covid con eficacia, eficiencia y suficiencia”.