AKTUALITATEA


| 2020-06-26 12:49:00

El portavoz de EH Bildu pone en valor el trabajo de la coalición que en los primeros meses firmó el 67% de las iniciativas de comisión y en la crisis del Covid presentó siete iniciativas que marcan el Plan de Reconstrucción

 

“Reversiones, euskarafobia, parálisis, unilateralidad y desprecio a la mayoría. Con estas cinco palabras definimos lo que ha sido este primer año de Navarra Suma en el gobierno de Iruñea, un año perdido no por el Covid-19, sino por la nefasta gestión de un tripartito de derechas obsesionado en contentar sólo a los suyos, incapaz de respetar la pluralidad de esta ciudad, repitiendo los mismos errores y corruptelas de siempre y perpetrando chapuza tras chapuza para llevar de nuevo a Iruñea al furgón de cola del progreso”. Con estas palabras Joseba Asiron, portavoz de EH Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona, resumía el primer año de legislatura, un ejercicio marcado también por la pandemia del Covid, una situación “sin precedentes” en la que “EH Bildu ha tratado de actuar con la prudencia, la responsabilidad y la madurez que la situación exigía y con la previsión de prepararnos para afrontar de la mejor forma posible los tiempos duros que vienen”.

“En junio de 2019 Enrique Maya recibió, gracias a la gestión del Gobierno del Cambio, un Ayuntamiento económicamente saneado y una ciudad encaminada a la superación de los tiempos de la confrontación. Pues bien, en sólo un año, la coalición que une a foralistas, antiforalistas, centralistas y ultras ha conseguido confrontar de nuevo a la ciudadanía, incendiar servicios esenciales de la administración y dilapidar buena parte del crédito económico recibido”, resumía Asiron. “Sólo la responsabilidad con la que está actuando la oposición, encabezada por EH Bildu, ha permitido que Iruñea no vuelva al 2011”, añadía.

Crisis del Covid; arrimar el hombro para salvar fallos e improvisaciones de Na+

Al respecto de la gestión de la crisis del Covid-19, el portavoz de EH Bildu, que ha comparecido junto a Maider Beloki y Endika Alonso, ha puesto en valor el trabajo desarrollado por la coalición siendo “sobre todo propositiva” y sabiendo “arrimar el hombro para alcanzar acuerdos de ciudad desde una premisa irrenunciable: Nuestra postura prioritaria ha sido, es y será siempre proteger a los más vulnerables no sólo durante la crisis sanitaria, sino también en la crisis económica que se avecina. La máxima es clara: No dejar a nadie atrás”.

Hasta siete iniciativas presentó la coalición soberanista en los dos primeros meses de la crisis, iniciativas que iban desde la creación de una bolsa de emergencia social que, básicamente, fijaba el marco de financiación y los objetivos prioritarios de lo que posteriormente fue el Plan de Reconstrucción, hasta un catálogo de actuaciones para adecuar pamplona a la nueva realidad de movilidad sostenible, pasando por los bonos de apoyo al comercio local o un plan de actuación en materia de Cultura (las siete propuestas detalladas en el anexo).

“Hemos respetado el principio de unidad de acción institucional, pero sin renunciar a nuestro deber de control”, explicaba Asiron. Y al respecto, anunciaba que “hemos pedido explicaciones y probablemente deberemos pedir responsabilidades por los múltiples fallos e improvisaciones con las que ha actuado el tripartito de derechas en cuestiones tan sensibles como la gestión oscurantista de la MECA, la errática gestión del personal municipal, la tardanza en la entrega de EPIS y equipos de protección, la denegación de ayudas y el problema abierto innecesariamente con los servicios preventivos”. Sobre este último tema, el portavoz de EH Bildu ha denunciado que “lo que se esconde detrás de esta polémica gestión es una muestra más de las ansias de reversión de la derecha que no quiere ni oír hablar de que los barrios cuenten con sus propios recursos”.

Intenso trabajo propositivo durante los primeros nueve meses

Asiron ha dedicado también parte de la rueda de prensa a analizar los 9 primeros meses previos a la crisis sanitaria. Al respecto ha destacado que “EH Bildu se ha guiado por los tres objetivos que nos propusimos al inicio de esta legislatura y que serán los que nos guíen también de aquí en adelante: Hemos sido incisivos en la acción de control  al equipo gobierno; hemos sido responsables y eficaces para llegar a acuerdos tanto con el resto de grupos de la oposición en temas clave como movilidad, cultura, ayudas sociales, igualdad o comercio, pero también para impulsar pactos de ciudad con el equipo de gobierno como es el caso de las medidas para enfrentar la crisis post-COVID. Y también hemos sido constantes y propositivos respecto al trabajo haciendo una oposición constructiva”.

“Si algo teníamos claro desde el principio de la legislatura era que no nos íbamos a sentar de brazos cruzados y limitarnos a criticar la acción del gobierno. Queremos ser una fuerza viva, que construye, y que trabaja, estemos en el gobierno o en la oposición”, resumía. Para ilustrar este trabajo, el portavoz de EH Bildu ha dado algunas cifras (añexo): en los 7 plenos ordinarios entre junio de 2019 y el 14 de marzo de 2020 se debatieron 19 mociones provenientes de la oposición de las que el 57,8% (11), venían firmadas por la coalición soberanista. En el mismo periodo, EH Bildu presentó 78 propuestas ante alguna de las tres comisiones con las que cuenta el Ayuntamiento siendo este número el 66,6% de las iniciativas que se debatieron en total (117) en esos primeros 9 meses previos a la crisis del Covid. “En aquel periodo el Ayuntamiento abordó tres iniciativas normativas de nuevo cuño, la nueva Ordenanza Reguladora de Locales de Apuestas, la revisión de la ordenanza de Protocolo y la propuesta de Ordenanza para el comercio local… Todas ellas eran de EH Bildu”, añadía Asiron que recordaba que durante ese tiempo “sólo se planteó un proyecto de actuación nuevo al margen de los que venían de la legislatura del cambio: un Jardín de las Cenizas en el Cementerio. También propuesta de EH Bildu”.

Euskarafobia, sectarismo e incapacidad para llegar a acuerdos, máculas de Maya

Y frente a esta “intensa actividad”, Asiron apuntaba cinco grandes manchas en el gobierno de Enrique Maya. En primer lugar “no aceptan lo que dicta la mayoría actuando desde la unilateralidad y primando sus promesas electorales sobre el interés general”. Pío XII, Padre Moret, Los Caídos o Escuelas Infantiles ilustran esto, al igual que el hecho de que “han incumplido sistemáticamente los acuerdos adoptados por la mayoría como el Plan de protección del patrimonio inmaterial, la reinstauración de los polibicis, el Plan de Movilidad Eléctrica o el plan formativo sobre violencia contra las mujeres”.

La segunda gran mácula es su “obsesión” por revertir lo hecho por el gobierno del cambio: “Revierten en movilidad y favorecen al coche privado; revierten en Cultura cargándose Hiriartea; revierten en memoria histórica con la Avenida del Ejército o los cuadros de reyes; revierten en participación e igualdad, recortando medios y personal, revierten en barrios, cargándose los equipos preventivos, o en sostenibilidad, haciendo lo mismo con la Comercializadora de energía”. La opacidad y las mentiras son la tercera característica de la gestión de Na+ con “actuaciones estelares” como “las dietas de Comiruña, la subida de sueldo del alcalde, el aumento de los cargos de libre designación o las mentiras en torno a la Pasarela de Labrit y la encuesta de Escuelas Infantiles”

La euskarafobia es la cuarta gran mácula. “Reversión en Escuelas Infantiles, recortes a la Ordenanza del Euskera., eliminación de puestos con perfil lingüístico, prohibición de la actuación de Pirritx eta Porrotx, recortes en la programación cultural o el ridículo de rechazar la Ordenanza de Participación por 4 palabras en euskera”, son ejemplo de ello. “Buscan marginar a una buena parte de la ciudadanía y con ello volver al clima de enfrentamiento gracias al que tantos años se mantuvieron en el poder”, resumía Asiron.

Finalmente, “la parálisis, la improvisación y la falta de ideas son también sus señas de identidad. Lo ocurrido en la calle Amaya es sólo un ejemplo gráfico, pero también podríamos hablar de la gestión del personal municipal, los contratos con los preventivos, la gestión de los no Sanfermines, la pista de esquí en Geltoki o la propuesta de impuesto a las bicis”. La paradoja es que esa parálisis “les obliga a tratar de usurpar como propios proyectos del Gobierno del Cambio contra los que votaron: Derribo de Argal, Amabilización, Casa de las Mujeres o el Parque Sur de la Txantrea”

“Esta forma de actuar tiene una consecuencia que es su incapacidad para llegar a acuerdos lo que va en perjuicio de la ciudadanía. Maya, en sus cinco años de alcalde, ha sido incapaz de aprobar un solo presupuesto y lo ha sido porque es preso de las obsesiones de la derecha y de su comportamiento sectario”, resumía Asiron.

Cinco áreas preferentes de trabajo para el segundo año de legislatura

La comparecencia ha finalizado con un adelanto de las líneas de trabajo que se plantea EH Bildu para el segundo año de legislatura. Vivienda, igualdad y justicia social; plan de barrios; Empleo social-sostenibilidad; Cambio climático-movilidad; Cultura-educación-normalización lingüística y Memoria histórica serán los cinco ejes de actuación preferente para EH Bildu con el objetivo prioritario de “continuar y profundizar en la estrategia política de alternativa al tripartito de derechas”.

Para ello la coalición se marca cuatro objetivos prioritarios: Buscar pactos y mayorías para hacer realidad inversiones de carácter social y progresista en la ciudad; llevar a la institución los debates de la calle para darles solución; liderar la apuesta por la innovación y dinamizar el trabajo con las entidades y personas que dinamizan la ciudad anteponiendo siempre la agenda social y medioambiental.

“Se avecinan tiempos duros e inciertos, pero al mismo tiempo, tenemos la oportunidad de mejorar nuestra ciudad y de mejorarnos a nosotros mismos. Y tenemos los mimbres para hacerlo. Tenemos la oportunidad de ser una ciudad más dinámica, más solidaria, más verde, más generosa, más pausada. Y en EH Bildu queremos ser la fuerza que lidere esa oportunidad. Para ellos seguiremos trabajando, con las mismas ganas, con el mismo ahínco y con la misma ilusión”, ha concluido Asiron.