AKTUALITATEA


| 2020-04-13 11:48:00

EH Bildu considera una mala noticia la decisión de la Fundación Vital de vender 500 viviendas protegidas del programa Vitalquiler al fondo de inversión sueco Catella. La escasa información aportada no permite hacer un análisis en profundidad de las consecuencias de la venta, pero si que genera preocupación. «Es una decisión que aleja y debilita la gestión y el control de la vivienda protegida en el territorio, y que condiciona su futuro a las decisiones que tome un fondo sueco, que siempre va a tener sus propios intereses», ha explicado Felix Gonzalez, concejal de la formación en el Ayuntamiento de Gasteiz.

Sorprenden también, para mal, las circunstancias en las que se ha conocido la operación. Ha sido a través de una circular para determinados inquilinos, de la que ha tenido constancia Kaleratzeak Stop. La venta se produjo el día 20 de marzo, en plena situación de emergencia sanitaria y estado de alarma, y ni la Fundación Vital ni las entidades que la componen han dado una sola explicación de los pormenores del contrato y sus condiciones. «Desde luego, lo sucedido no va en la linea de fortalecer y mejorar la obra social, y menos en tiempos de crisis como los que vivimos, sino justo en la dirección contraria», adivierte Gonzalez.

EH Bildu denunció en su momento que la conversión de la Caja de Ahorros de Vitoria y Alava en fundación bancaria suponía una privatización de facto de la entidad, y convertía lo que hasta entonces era un patrimonio compartido de gasteiztarras y arabarras en un club privado gestionado por personas designadas a dedo por PNV y PSE. «No existe un mínimo control democrático sobre las decisiones de la fundación. Las viviendas de Vitalquiler son parte de un patrimonio de toda la ciudadanía, y se juega con ellas sin ninguna explicación. El oscurantismo en la gestión de la Fundación Vital es absoluto», remarca el concejal de EH Bildu.

Se da la circunstancia de que el Ayuntamiento de Gasteiz como la Diputación Foral de Araba, en tanto que entidades fundadoras, designan directamente representantes en el patronato directivo de la fundación. En concreto, su presidente es Jon Urresti, designado por el gobierno municipal de Gasteiz. Urresti se ha negado una y otra vez a comparecer y dar explicaciones en sede municipal acerca su gestión al frente de la fundación. EH Bildu solicitará de nuevo explicaciones a la fundación y también al gobierno municipal, en calidad de responsable último de las decisión tomada respecto a las viviendas de Vitalquiler.