AKTUALITATEA

| 2020-05-16 09:44:00

Una vez concluido el dispositivo de llamadas a personas mayores durante el aislamiento, el grupo municipal EH Bildu confía en que el mismo “haya dado sus frutos en cuanto a detección de personas en situación de desprotección con el objetivo de ayudar a las mismas”. En ese sentido, ha manifestado que este ejercicio “servirá para implementar nuevas formas de ayuda”, a la luz de las necesidades manifestadas por las personas contactadas. Por ejemplo, según ha dicho, “algunas personas han manifestado necesidades tan simples y vitales como tener a alguien para que le acompañe a pasear”.    

La tarea ingente de telefonear y entrevistar con mucho tacto a todas las personas mayores de 65 de Bilbao la han llevado a cabo desde la plantilla de trabajadores del Ayuntamiento, bajo la coordinación de las responsables de Acción Social. 

Jone Goirizelaia, portavoz del municipal de EH Bildu Bilbo, ha felicitado al personal del Ayuntamiento de Bilbao por la “profesionalidad demostrada atendiendo a miles de ciudadanos y ciudadanas”. “Esta labor extraordinaria es fruto del esfuerzo realizado por estos y estas trabajadoras durante esta crisis sin precedentes”, ha añadido. 

Cabe reseñar que al nutrido grupo de personal municipal, se unieron después, y estos sí como voluntarios, varios representantes políticos. En el caso de los concejales de EH Bildu, “hemos realizado en torno a 200 llamadas preservando en todo momento el anonimato, como marcaba el protocolo”, ha explicado. En la tarea se han encontrado todo tipo de situaciones: “decesos, personas aisladas y necesitadas, ganas de hablar, agradecimientos y alguna bronca por la tardanza”.

Mediante este dispositivo, “se ha podido testar el estado anímico de las personas telefoneadas, detectar situaciones de urgencia por desprotección y vislumbrar otro tipo de necesidades que tal vez no se sopesaban antes de la crisis”. Según EH Bildu, “gracias a esto se podrían diseñar nuevos servicios asistenciales de los que ahora adolece el sistema de protección público, pero ahora se verían como necesarios para asegurar una vida digna a las personas mayores en situación de soledad”. 

Goirizelaia ha recordado que “la propuesta inicial de activar el servicio la hicieron las redes de apoyo voluntario de los barrios, nada más comenzar el periodo de aislamiento, y, tras pedirle al Ayuntamiento repetidas veces la necesidad de hacerlo, éste tardó nada menos que seis semanas en iniciar las llamadas”, según denunciaron desde la red de redes vecinales.