AKTUALITATEA


| 2021-10-11 11:51:00

Una vez finalizada la primera fase de aportaciones al borrador Klima Araba 2050, el documento recoge, tal y como solicitaba EH Bildu, la creación de un Observatorio de Transición Energética. Es una de las múltiples aportaciones que realizó EH Bildu. Ahora, en esta segunda fase, ha pedido ir más allá para dotarle de instrumentos que permitan que ese observatorio garantice un control público y democrático. Además, ha exigido que este plan sea transparente y consensuado y que se abra a la participación real y activa de los agentes sociales. En total, EH Bildu ha registrado otras 15 aportaciones al borrador.

 

Para EH Bildu, se trata en líneas generales de un plan “poco ambicioso” que no concretaba escenarios y que tampoco alcanzaba los objetivos marcados por los diferentes tratados internacionales. Ahora, sí se plantea que el objetivo de la Estrategia debe ser la descarbonización del territorio y conseguir un territorio neutro en carbono para 2050. Sin embargo, el plan sigue sin definir las zonas de exclusión de energías renovables tanto en los entornos naturale scomo en las tierras de alto valor agrícola. En este punto, EH Bildu apuesta por mantener las zonas de exclusión que ya aparecían en el Plan Mugarri, esto es, Red Natura 2000, Paisajes Singulares o Sobresalientes, zonas de nidificación de rapaces y áreas declradas de interés especial para especies en peligro de extinción.

 

En esa línea, EH Bildu apusta por priorizar aquellos emplazamientos más atronpizados y accesibles que tengan menos impacto desde el punto de vista ecológico y paisajístico. En todo caso, entiende que debe someterse a una Evaluación Conjunta de Impacto Ambiental y que se debe primar el principio de precaución. En lo que a huertos solares hace referencia, se plantea demás excluir aquellos terrenos con pendientes superiores al 20% y que los suelos de cultivo de elevada calidad agroecológia sean protegidos.

 

Por otro lado, EH Bildu plantea tres nuevas propuestas: alcanzar una movilidad sostenible y resilente modernizando las infraestructuras ferroviarias actualmente infrautilizadas en la línea Altsasu-Miranda y la línea C3 Aiaraldea, la elaboración de una estrategia agroalimentaria y la creación de un Consejo Agroalimentario de Araba y la reducción de residuos urbanos con el objetivo de vertido cero estimulando una economía circular, mediante un modelo local y descentralizado de tratamiento de biorresiduos y su posterior uso en el sector ganadero.