AKTUALITATEA

| 2024-10-25 09:30:00

El Pleno del Ayuntamiento de Artziniega ha aprobado hoy la modificación de varias ordenanzas fiscales de impuestos, tasas y precios públicos para su entrada en vigor en 2025, con los votos favorables de EH Bildu y la abstención de EAJ-PNV. La tasa que mayor cambio reflejará será la del servicio de recogida de basuras, y que se explica por la obligación europea de repercutir el 100% del coste de esa gestión al ciudadano, por el aumento del precio de la contrata ya que de cara a 2025 se licitará la nueva concesión del servicio en toda la Cuadrilla de Ayala y por el aumento del precio de la tonelada de residuos en destino, en la planta de tratamiento de Gardelegi (Gasteiz). Este incremento supondrá que las viviendas en Artziniega pasarán de pagar 116,44 euros al año a abonar 142,42 euros anuales; en el caso de las viviendas de los pueblos de la periferia, pasarán de pagar 87,33 euros al año a 128,18, con la previsión de alcanzar en 2026 el 100% del costo.

Respecto a la Ordenanza fiscal reguladora del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, el alcalde, Joseba Vivanco, explicó que “aquí no se tocan los tipos de gravámenes, sino que se modifica la ordenanza para, por un lado, y muy importante, introducir bonificaciones en función de diferentes tramos de renta de la unidad familiar y el número de miembros de esa unidad familiar, hasta una cuantía de ingresos de 42.000 euros anuales, de manera que se beneficien las unidades familiares con menores rentas; también beneficiar con descuentos a aquellas viviendas que se vayan dotando de medidas de eficiencia energética; y, como importante novedad, aplicar un recargo de hasta el 50% a toda aquellas viviendas consideradas vacías dentro del municipio. Este último aspecto es una herramienta que la ley nos permite a los Ayuntamientos y que queremos empezar a implementar, de manera que sea un instrumento más, entre muchos, para favorecer esa salida al mercado de la vivienda vacía”.

En relación a la Ordenanza fiscal reguladora del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, desde 2015 no se había tocado este impuesto. Lo aprobado hoy supondrá una subida del 10% en las diferentes categorías (unos 8 euros más al año para la franja de vehículos cuya potencia en caballos en la más común), a la vez que se incluyen bonificaciones para toda la gama de vehículos en función de su combustible, su incidencia en el medio ambiente y ahorro energético, además de una bonificación a familias numerosas regulada en función de la renta.

Igualmente se han actualizado ordenanzas como la que regula el cementerio municipal, o las de servicios públicos y realización de actividades administrativas. Así, el precio de entrada de las piscinas municipales para 2025 sube un 1 euro la entrada individual y 5 euros el abono de temporada (el año próximo se licita un nuevo contrato de gestión de las piscinas ye so incrementará sustancialmente el coste), se pasan a cobrar los informes urbanísticos que se soliciten al Ayuntamiento o se regulan ya por escritos los precios y criterios que regirán la inscripción y pago d elos diferentes cursos municipales.

Joseba Vivanco ha explicado que “ni la bajada ni la congelación de impuestos y tasas solucionan la grave situación de las personas y unidades convivenciales en situación de mayor vulnerabilidad, y no realiza ninguna aportación de cara a la superación de las desigualdades sociales y a la redistribución de la riqueza. Porque donde debemos poner el acento es en las bonificaciones. A través de las bonificaciones, podemos ayudar a las personas y unidades convivenciales que se encuentran en una situación real de mayor vulnerabilidad. Y ese es el camino”.

En este sentido, el alcalde de EH Bildu ha añadido que “un Ayuntamiento como el nuestro se nutre principalmente de la financiación foral, de la obtención de subvenciones que nos permitan afrontar sobre todo obras y mejoras, y de los impuestos y tasas municipales sobre los cuales quien los paga, todas y todos, debemos velar porque reviertan de una manera efectiva en una mejor calidad de vida y unos mejores servicios. Y todo ello sin olvidar, al contrario, que sirva de faro, una política de gravámenes que tienda a superar las desigualdades sociales y la redistribución de la riqueza”.