AKTUALITATEA


| 2020-03-04 13:30:00

Dos edificios alineados con la actual trama urbanística sin invadir la Ripa de Beloso y con 91 viviendas en régimen de protección, trasladando el resto (97 pisos) a una parcela de Arrosadía por cuya ocupación el Ayuntamiento de Pamplona ingresará 1,5 millones de euros, es la solución que, junto al Gobierno de Navarra, han pactado EH Bildu, PSN y Geroa Bai para el contencioso generado en Erripagaña por el desarrollo del PSIS impulsado por los gobiernos de la derecha y cuestionado ahora por el vecindario. Pero el acuerdo alcanzado entre las tres fuerzas con el amparo del Ejecutivo foral, y que será presentado mañana en forma de moción de urgencia ante el Pleno, contempla además la promoción de otras 157 viviendas en otras parcelas ubicadas de Arrosadía, Etxabakoitz Norte, Sadar-UPNA y San Jorge-Sanduzelai que serán promovidas por el Gobierno de Navarra en unos tres años.

En total, el acuerdo entre las fuerzas de la oposición, que representan a la mayoría del Pleno, implica inyectar en los próximos años en el mercado inmobiliario de Pamplona hasta 345 viviendas protegidas, todas ellas en régimen de alquiler y blindadas ante fondos buitre (no saldrán al mercado libre), que se destinarán prioritariamente a “la emancipación de la gente joven y la protección de las familias vulnerables”. La propuesta de acuerdo de Pleno, que una vez sea aprobada se enviará formalmente al Gobierno, prevé repartir al 50% los pisos en alquiler entre estos dos sectores, “buscando la mejor distribución e integración en su entorno”.

Una solución al contencioso de la Ripa que no supone “tirar” 6 millones

Los tres grupos han acordado “en aras a resolver la cuestión de la ladera de Erripagaña, mejorando la calidad urbana del barrio y garantizando a su vez tanto una buena oferta de vivienda pública en alquiler en la Ciudad como ingresos para acometer las inversiones que se prevean para este año”, respaldar dos puntos concretos. En primer lugar, proponen que se construyan “solamente 91 viviendas en las parcelas del Banco Foral de Suelo que el Gobierno de Navarra tiene en Erripagaña, permitiendo con ello preservar la ladera de Beloso, en lo que a las subparcelas BF1 y BF2 les corresponde”. Esto, en la práctica, supone apoyar la solución propuesta por el Gobierno realineando los edificios previstos en la Ripa con la actual trama y rebajando a la mitad su carga en pisos.

En segundo lugar, los grupos proponen incorporar al acuerdo “la venta a Nasuvinsa de la parcela A 13A de Arrosadia con 97 viviendas, con un valor estimado de 1.500.000 euros que ingresará el Ayuntamiento y condicionada a destinarse a perpetuidad a vivienda pública protegida en alquiler”. Con esta medida los tres grupos buscan contrarrestar la propuesta del tripartito de derechas que consistía en ceder al Gobierno de Navarra “una manzana completa de propiedad municipal en el barrio de Arrosadia para construir allí las viviendas y esa zona de Erripagaña dejarla libre. Una alternativa que podría suponer una pérdida patrimonial para las arcas municipales de alrededor de 6 millones de euros”.

Cuatro parcelas nuevas para VPO en alquiler

Pero el acuerdo alcanzado entre las tres fuerzas no se limita al tema de la Ripa de Beloso, sino que adelanta también escenarios para poder incidir en el mercado inmobiliario a través de la promoción de otras 157 viviendas de alquiler social para jóvenes y familias con necesidad. En concreto se propone incorporar al acuerdo la cesión al Gobierno de Navarra de cuatro parcelas con este destino: la parcela A 1.3 con 61 viviendas en Arrosadia; la parcela C-1 con 40 viviendas en Etxabakoitz Norte; la parcela P 1.3 en Sadar-UPNA con 13 viviendas; y la parcela P 1.2 en San Jorge-Sanduzelai con capacidad para 43 viviendas. La propuesta contempla que “estas parcelas se destinarán durante el tiempo de la cesión a ese destino de vivienda pública en alquiler, tras lo cual volverán con las edificaciones construidas al dominio del Ayuntamiento”. Todas las viviendas se calculan con una superficie media de 75 metros cuadrados.

El cuarto punto de la moción que se votará mañana en Pleno contempla que “la oferta de estas viviendas tendrá como destino y objetivo la emancipación de la gente joven y la protección de las familias vulnerables y se repartirá al 50% entre estos dos sectores, buscando la mejor distribución e integración en su entorno”.

En el expositivo de la moción, tras un repaso histórico del proyecto de PSIS impulsado y modificado en su día por los gobiernos de la derecha, los tres partidos que representan a la mayoría del Pleno explican que aceptan la solución pactada reduciendo la edificabilidad de VPO en Erripagaña por un motivo fundamental: porque “la propuesta tiene aspectos positivos en relación a la calidad urbana del barrio al reducir la densidad y preservar la ladera pero se hace a costa del 50% de las viviendas que pasan a construirse en otra zona”. Eso se pretende compensar ahora mediante este acuerdo por “conseguir una promoción conjunta (con Gobierno de Navarra) de alrededor de 345 viviendas públicas en alquiler blindadas a fondos buitre y la obtención de aproximadamente 1.500.000 de euros para inversiones”.