AKTUALITATEA


| 2020-06-17 12:17:00

Introducción

El virus Covid-19 ha acelerado y ha hecho evidentes las crisis que ya teníamos entre nosotros y nosotras: crisis ecológica, crisis del sistema de cuidados, nueva crisis socio-económica... Ahora la pregunta es en qué dirección nos vamos a poner de pie y vamos a empezar a andar. Y EH Bildu de Donostia tiene muy clara la respuesta: reconstruir el pasado no tiene futuro. Porque reconstruir el pasado es volver a cometer los mismos errores y, por tanto, sufrir las mismas consecuencias. Pero más allá de esto, reconstruir el pasado no tiene sentido, simple y llanamente, porque el mundo ha cambiado y ya nada va a ser como antes de la pandemia.

Esta es una propuesta para que la ciudad se ponga de pie de nuevo cuanto antes, para enderezar el rumbo y empezar a andar. Menospreciar las consecuencias sanitarias y socioeconómicas de la crisis es un error que se va a pagar muy caro en un futuro cercano. Eneko Goia y el Gobierno municipal están cometiendo este error. Debemos estar a la altura de las circunstancias y actuar de acuerdo con una crisis sin precedentes en la historia contemporánea, activando las capacidades comunitarias de Donostia para prever lo que está por venir y recolocarnos ante una situación socioeconómica realmente compleja.

Objetivo

La misión de este plan de choque es articular los instrumentos públicos y privados necesarios para paliar, en la medida de lo posible, los efectos que la crisis del Covid-19 está dejando en el tejido socio-económico de Donostia y, al mismo tiempo, articular los mecanismos de financiación e inversión necesarios para que en un futuro próximo podamos salir de la crisis con una ciudad más igualitaria y más innovadora, sin dejar a nadie atrás, y poder así hacer frente de forma óptima a los enormes retos que tiene ante sí Donostia.

Breve análisis de situación

La economía mundial ha entrado en recesión y hay muchas razones para pensar que en adelante cada vez serán más frecuentes crisis de este tipo. Y es que a la emergencia sanitaria del Covid-19 se suma a la emergencia climática que ya venía de antes y, además, se prevé que la recesión económica va a ser muy dura.

En estos meses ha quedado clara una cosa: la importancia del sector público, que poco a poco se iba desmantelando en todas partes del mundo, también en Donostia. De cara al futuro, habrá que recuperar el control público y social de las políticas públicas, ofertando servicios de calidad para satisfacer las necesidades básicas de toda la ciudadanía, y defendiendo un empleo de calidad. Es el momento de los liderazgos públicos, de articular políticas públicas y comunitarias que estén a la altura de una ciudadanía digna, que se cuida y apoya mutuamente y que genera oportunidades para todos y todas.

Son tiempos en los que será imprescindible aunar enfoques a corto y medio plazo. Es decir, hay que adoptar medidas urgentes para paliar los efectos socio-económicos de la crisis de hoy. Pero al mismo tiempo hay que activar un vector de transformación que corrija los graves errores del sistema y empiece desde hoy a construir las bases de un nuevo modelo de desarrollo y bienestar social.

Plan de choque

Con el objetivo de que Donostia emprenda un nuevo rumbo, la propuesta que presentamos se guía por tres principios fundamentales: reforzar los servicios público-comunitarios, avanzar hacia una sociedad de cuidados y poner la economía al servicio de la vida y del bien común.

El sistema que nos ha traído a esta nueva crisis exige un cambio de paradigma. Tenemos que construir un nuevo sistema que ponga a las personas en el centro, construyendo un proyecto propio, de acuerdo a nuestras necesidades y anhelos que tenemos como Pueblo.

La nuestra es una opción radical por poner a la vida en el centro de las políticas públicas, sin dejar a nadie atrás, repartiendo la riqueza y buscando la prosperidad para todos y todas. Este es un plan para proteger y cuidar a toda la ciudadanía donostiarra, para paliar los daños causados por la emergencia sanitaria y crear nuevas condiciones para un futuro mejor.

1. Fuentes de financiación del plan de choque

+46,5 millones de euros

La crisis que ha provocado Covid-19 ha supuesto un duro golpe para toda la sociedad, con consecuencias en la vida de todos y todas, también en Donostia. La economía de la ciudad se ha visto seriamente afectada, se han destruido cientos de puestos de trabajo, se han intensificado las situaciones de vulnerabilidad, quedando en entredicho incluso el modelo económico impulsado desde las instituciones. Como consecuencia de todo ello, la crisis va a afectar notablemente a las arcas municipales. Por un lado, porque el Ayuntamiento ha tenido que hacer gastos no previstos para hacer frente al Covid-19 y, por otro, porque no va a poder disponer de una serie de ingresos que estaban previstos.

Según los datos facilitados por el Gobierno municipal, se espera una pérdida de ingresos de entre 76 y 81 millones de euros, tanto por la pérdida de fuentes de ingresos vía impuestos y tasas, como por el anuncio de la Diputación de Gipuzkoa de reducir el Fondo Foral de Financiación Municipal (FFFM). Así las cosas, está claro que hay que revisar el presupuesto municipal para 2020 porque ya no sirve para responder a las necesidades que tiene la ciudad. Asimismo, de cara al futuro, es necesario consensuar líneas de actuación para asegurar las nuevas fuentes de ingresos. Y es que esta crisis ha demostrado que el modelo económico actual de la ciudad está hecho de mimbres demasiado volátiles.

EH Bildu de Donostia propone las siguientes líneas de actuación para obtener ingresos:

Límite de gasto

El acuerdo alcanzado por EH Bildu con el PSOE y Unidos Podemos en el Congreso permitirá a las instituciones autonómicas, forales y locales disponer de mayor capacidad de gasto y flexibilidad para poner en marcha políticas públicas en beneficio de la ciudadanía y hacer frente a las consecuencias sociales derivadas de la crisis de Covid-19. Como se recordará, EH Bildu ha acordado con el PSOE y Unidos Podemos dejar fuera del cómputo de la norma de gasto el dinero que los ayuntamientos destinen a políticas sociales.

Además, EH Bildu ha logrado el compromiso de establecer la capacidad de endeudamiento de la Comunidad Autónoma Vasca y de la Comunidad Foral de Navarra sólo en función de la situación financiera de sus instituciones.

Gracias a este acuerdo, el Ayuntamiento de Donostia tendrá más capacidad económica para hacer frente a esta situación de crisis.

Fondo Foral de Financiación Municipal: + 30 millones de euros

EH Bildu considera que la Diputación Foral de Gipuzkoa debería asumir su responsabilidad ante la difícil situación que estamos padeciendo los ayuntamientos y la ciudadanía en general. Por ello, creemos que no procede reducir el fondo de dinero que la Diputación había comprometido a los ayuntamientos y que éstos, a su vez, habían asignado a partidas presupuestarias. En toda caso, debería ser la propia Diputación la que debería endeudarse para ayudar a las instituciones municipales en la financiación que necesitarán en esta difícil situación. Por eso proponemos que el Ayuntamiento de Donostia alcance un acuerdo con la Diputación para mantener la aportación foral comprometida (30 millones de euros).

Ayuda o crédito para paliar los sobrecostes causados por Covid-19: + 3 millones de euros

Solicitar a la Diputación Foral de Gipuzkoa una subvención de 3 millones de euros al Ayuntamiento de Donostia para paliar los gastos extraordinarios ocasionados por Covid-19. Según las primeras previsiones de principios de mayo, Fomento San Sebastián había gastado un millón de euros extra y, por otra parte, para contrataciones de emergencia, entre 1,1 y 1,9 millones de euros. Si la subvención directa no es posible, la Diputación debería ofrecer un crédito de ayuda sin interés de 3 millones de euros al Ayuntamiento de Donostia, a devolver durante los próximos cuatro años.

Suspensión o aplazamiento de algunos proyectos: + 11,5 millones de euros

Dentro de un replanteamiento general de las inversiones municipales, al margen de otros proyectos que puedan aplazarse, proponemos que las partidas destinadas en 2020 a estos tres proyectos se destinen a la concesión de ayudas sociales a las personas más necesitadas:

  • Proyecto del faro de la Isla de Santa Clara: 4 millones de euros
  • Oficina de Turismo en el edificio de la Ayuntamiento: 1,7 millones de euros
  • Pasarela Iztueta: 5,8 millones de euros

Fuentes de ingresos tributarios municipales

Tasa COVID. Es imprescindible aplicar medidas fiscales adicionales y excepcionales para garantizar los recursos suficientes para establecer las políticas públicas que necesitamos con urgencia. EH Bildu propone la implantación de la denominada Tasa COVID, como recargo en diversos impuestos directos, que suponga un aumento temporal y parcial de los impuestos a las personas y empresas con mayor capacidad económica.

En el mismo sentido, EH Bildu de Donostia propone incrementar las tasas por servicios municipales en un 5% para las grandes cadenas comerciales que hayan obtenido beneficios superiores al 10% durante la crisis sanitaria Covid-19, con el fin de que estas empresas contribuyan solidariamente a la financiación de los servicios a la comunidad. Este impuesto a las grandes superficies entraría en vigor al menos durante los dos años siguientes, a los siguientes tipos:

  • Tasas por la utilización del dominio público municipal
  • Tasas por servicios y actividades municipales
  • Tasas por la Utilización Privativa y el Aprovechamiento Especial del Suelo, Subsuelo o Vuelo de las vías públicas municipales, a favor de empresas explotadoras de servicios de suministros que resulten de interés general o afecten a la generalidad o a una parte importante del vecindario
  • Tasas por actividades en locales
  • Tasas por Licencias Urbanísticas
  • Tasas de Servicios Urbanísticos
  • Tasas de servicios de abastecimiento de agua
  • Tasa por el Servicio de alcantarillado
  • Tasas de Servicios para la Recogida de Residuos Sólidos Urbanos
  • Tasa por ocupación del dominio público por empresas de telefonía móvil
  • Tasas para garantizar el derecho a la vivienda

Recargo del IBI a las viviendas vacías: Proponemos subir el IBI a los cientos de viviendas en desuso en nuestra ciudad para que salgan al mercado del alquiler ordinario. De esta forma, ofreceremos una alternativa habitacional a los y las donostiarras que se han visto obligados a abandonar sus barrios por el fuerte incremento del precio del alquiler en nuestra ciudad.

Aumento de las tasas a los pisos turísticos: está ya científicamente demostrado que las viviendas turísticas han disparado el precio del alquiler en Donostia. En un contexto de grave crisis socio-económica, se debe priorizar el derecho a la vivienda. En concreto, proponemos el incremento de las tasas de agua y saneamiento y la tasa de residuos de las viviendas turísticas.

Fortalecer la inspección fiscal. Debemos intensificar la lucha contra la evasión fiscal y el fraude. Para ello:

Hay que cerrar las vías de elusión fiscal, reduciendo las bonificaciones y las deducciones.

Hay que vigilar rigurosamente el fraude. Para ello, es necesario extremar los protocolos y dotar al Departamento de Hacienda de los medios técnicos suficientes, así como aumentar el personal si fuera necesario.

Incremento de la dotación anual para las ayudas de emergencia social: + 1 millón de euros

El pasado 24 de marzo, el Gobierno Vasco acordó incrementar en 16 millones de euros la dotación anual prevista para estas ayudas. Por ello, el Ayuntamiento de Donostia recibirá en 2020 un millón de euros más de lo previsto.

Fondo Social Extraordinario del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030

El 29 de abril, el Gobierno Vasco recibió 13.395.064 de euros del Fondo Social Extraordinario del Ministerio de Derechos Sociales. Entre los objetivos de este fondo se encuentran reforzar los servicios y recursos para las personas dependientes, incrementar los recursos para las personas en situación de calle y reforzar el sistema público de cuidados. EH Bildu ha pedido que ese dinero se reparta entre los ayuntamientos y, sobre todo, se destine a las grandes ciudades. El PNV aún no ha respondido y el dinero está parado.

Proyectos de otras administraciones en Donostia: 80,4 millones de euros

Al parecer, las obras de la estación del TAV de Donostia comenzarán este verano. Aunque esta partida no depende únicamente del Ayuntamiento (pero sí de los partidos que están en el Gobierno municipal), creemos que en medio de un crisis de estas dimensiones no se peude seguir con este despilfarro de dinero, ya que no supondrá ningún beneficio para los y las donostiarras a corto o medio plazo (y cada vez hay más dudas de que lo tenga a largo plazo). Proponemos destinar estos 80,4 millones a mejorar el sistema sanitario público vasco, los servicios sociales y el transporte público (dBus).


2. Avanzar hacia nuevo sistema de cuidados

10 millones de euros

En estos mismos momentos, cientos de donostiarras ven cómo se les han reducido radicalmente sus ingresos o se han quedado sin ellos y, de un día para otro, tienen serias dificultades para hacer frente a sus necesidades y gastos básicos. El Covid-19 nos ha demostrado que en Donostia somos mucho más vulnerables de lo que pensábamos.

Las medidas adoptadas para contener el virus han causado grandes prejuicios a muchas personas: cierre temporal de negocios, reducciones de jornada, despidos, impagos o aplazamientos en el pago de nóminas, ERTEs, etc. También hay que decir que en Donostia la tasa de paro ha aumentado más que en otras capitales por nuestra dependencia económica del sector turístico. Y a todo esto hay que añadir que en Donostia se estaban incrementando en los últimos años las desigualdades de renta entre barrios y se estaban creando nuevas desigualdades.

Por ello, creemos que es hora de reforzar nuestro sistema de cuidados, no sólo para hacer frente a las necesidades que se han creado ahora, sino para construir un sistema de cuidados sólido de cara al futuro, ya que es uno de los principales retos que tenemos como ciudad de cara a los próximos años.

Además, no podemos olvidar que el sector de los cuidados genera muchos puestos de trabajo y, aunque hasta ahora se estaba creando un trabajo muy precario, la apuesta de la ciudad, también en este sector, debe ser crear un trabajo con condiciones laborales dignas. Y creemos que en las inversiones a realizar por el Ayuntamiento hay que cumplir otro requisito: vincular las subvenciones al desarrollo económico local, sobre todo a la reactivación del comercio local.

Principales medidas que propone EH Bildu para avanzar hacia un nuevo sistema de cuidados en Donostia:

Garantía de ingresos y economía doméstica: incrementar al menos un 25% los presupuestos de las Ayudas de Emergencia Social y de las subvenciones municipales (Ayudas de apoyo al Plan de Trabajo Compartido). Flexibilizar y acelerar las condiciones de acceso a estas ayudas para proteger a las personas y familias que se han quedado sin ingresos.

Medidas para evitar los desahucios: los fondos buitre se están desplegando por Donostia y, como consecuencia de ello, se prevé que en los próximos meses se multipliquen los desahucios. Esto exige una respuesta social e institucional firme. Por parte del Ayuntamiento, proponemos utilizar las viviendas disponibles en el parque público de Etxegintza para hacer frente a los desahucios y, asimismo, proponemos modificar la baremación del precio de alquiler social y que sea haga en función de los ingresos de las familias.

Compromiso de no dejar a nadie en situación de calle: mantener las 172 plazas que se han creado para el confinamiento y hacer partícipes de ello a las organizaciones sociales que trabajan en este ámbito. Además, proponemos satisfacer las necesidades alimentarias de los colectivos más vulnerables a través del comercio local, para lo cual proponemos habilitar un “bono social” gestionado por el ayuntamiento.

Utilizar el servicio municipal de ayuda a domicilio también para la conciliación de las familias. Entre los problemas sociales que han aflorado en esta pandemia hay que destacar los relacionados con conciliación de la vida laboral y familiar. La Administración y, en este caso, el Ayuntamiento debe ofrecer herramientas de apoyo a la conciliación y, por ello, proponemos adecuar la función del servicio a domicilio. Además, esta medida serviría para compensar las horas de trabajo que las auxiliares han perdido durante el confinamiento. Para poder llevar a cabo esta medida, hay que hacer una modificación de la normativa del servicio.

Medidas para satisfacer las necesidades alimentarias desde una perspectiva comunitaria. Cuando hablamos de alimentación no hablamos de la comida en sí misma, sino de todo lo que rodea a esa acción: poder comprar comida sana, tener un espacio adecuado para cocinar, la importancia social y emocional que tiene comer en grupo... Hay familias y particulares que no tienen recursos para hacerlo y niños/as que han perdido su comida más importante del día al suspenderse el servicio de comedor de las escuelas. Propuesta: que el Ayuntamiento haga un reparto de menús en todos los barrios, utilizando para ello los recursos municipales (cocinas y centros culturales de los hogares de jubilados) y analizando con las redes de cuidados creadas en la ciudad durante la pandemia cómo se puede hacer el reparto. En cualquier caso, los productos se comprarán en el pequeño comercio de la ciudad.

Bonos sociales en el comercio. Hasta ahora los ayuntamientos repartían dinero para cubrir las necesidades de las familias (dentista, ropa, electrodomésticos...) cuando las familias cumplían los requisitos establecidos en la ley. Propuesta: en vez de repartir dinero, repartir bonos sociales para satisfacer estas necesidades a través del comercio local.

Derecho universal a la educación: la pandemia ha puesto de manifiesto la brecha digital existente en Donostia y, por ello, proponemos universalizar el acceso a Internet, multiplicando los nodos de la red abierta Donostia Wifi para llegar al mayor número de hogares posible, o garantizando la conexión a Internet por otras vías. Asimismo, el Ayuntamiento, junto con los centros educativos y el Departamento de Educación, debe elaborar un listado de alumnos/as que carecen de ordenador (trabajo que está muy avanzado ya por los centros escolares). Ya se sabe que el curso que viene también va a ser muy especial y Donostia tiene que estar preparada para afrontar lo que viene, y para que no vuelva a ocurrir lo que ha pasado desde de marzo, que muchos alumnos y alumnas donostiarras no han podido seguir los estudios on line a causa de la brecha digital

Cuidado de personas dependientes

  • Elaboración del listado de familias afectadas por el cierre de centros de día y reconocimiento de oficio de la prestación económica para cuidados en el entorno familiar (junto con la Diputación Foral de Gipuzkoa).
  • Mejorar la accesibilidad en los hogares de las personas dependientes a través de los gremios urbanos (ver apartado 3).
  • Suspensión del límite horario para la prestación del servicio de ayuda a domicilio.
  • Creación de una red de empleadas de hogar en colaboración con los colectivos del tercer sector (para, por un lado, proteger a las personas trabajadoras y, por otro, tener una especie de "bolsa de trabajo" para satisfacer la demanda de las personas cuidadoras).


 

3. Promoción de la obra publica local

20 millones de euros

Proponemos aprovechar los recursos con los que cuentan las instituciones para incidir, dinamizar y fortalecer la economía. Para ello, es necesario poner en marcha un programa integral de promoción de la obra pública que, a través de la inversión pública, impulse proyectos que beneficien a los y las donostiarras y que, fruto de esta actividad, refuerce también los ingresos del Ayuntamiento (según algunas fuentes, el retorno fiscal en este ámbito puede llegar a ser del 49%).

Eso sí, decimos claro que no estamos hablando de construir macro-infraestructuras sin retorno social, menos en una situación de crisis sanitaria y económica como esta. Proponemos desarrollar proyectos urbanísticos para mejorar la calidad de vida de los y las donostiarras y para lograr un equilibrio de habitabilidad entre los barrios. Además, porque, junto al beneficio directo para la ciudadanía, esta inversión pública tendrá un efecto multiplicador en el tejido económico de la ciudad y del territorio, creará empleo y también tendrá repercusión en los ingresos municipales por obras y otros impuestos. Por ejemplo:

Obras de renovación de infraestructuras públicas: polideportivos, casas de cultura, oficinas municipales y similares. Mantener lo previsto en el presupuesto del Ayuntamiento para 2020: la renovación del campo de fútbol de Matigoxotegi (330.000 €), acordada por eh Bildu y el Gobierno municipal. Además, proponemos la renovación de la casa de cultura Larrotxene (600.000 €), el acondicionamiento de la casa de cultura para el barrio en el instituto Bidebieta (225.000 €), la renovación del polideportivo de Bidebieta (600.000 €), etc.

Planes Urbanísticos Especiales de Rehabilitación de Barrios: accesibilidad, seguridad y eficiencia energética. El presupuesto del Ayuntamiento para 2020, acordado por EH Bildu con el Gobierno municipal, contempla la redacción de un Plan Especial de Rehabilitación de Oleta-Pikabea (70.000 €). Las obras previstas por el citado Plan (500.000 €) deberán desarrollarse en los próximos años. Al tiempo que se mantiene ésta, proponemos realizar una auditoría urbanística de los barrios con muchas cuestas, para determinar las necesidades de cada uno, y establecer prioridades. Cada año, se redactaría un plan especial urbanístico para rehabilitar un barrio y al año siguiente se iniciarían los trabajos.

Mejorar la accesibilidad en los hogares de las personas dependientes a través de los gremios urbanos locales. En este sentido, consideramos un error político de bulto por parte del Gobierno de Eneko Goia la suspensión de las las subvenciones para la accesibilidad y rehabilitación de los edificios residenciales y viviendas de cara al año 2020, decretada el pasado 4 de junio. Cuando más hace falta reactivar la economía local, lo que no se puede hacer es recortar en actividades tractoras.

4. Medidas para reactivar la economía local

10 millones de euros

Toca ahora reorganizar la economía local, con un objetivo claro: poner las personas y la vida en el centro. Es decir, poner la economía al servicio de la vida y las personas y no al revés. El objetivo de las medidas que presentamos a continuación es paliar los efectos inmediatos de la crisis y canalizar en clave transformadora la activación económica.

Los efectos de la crisis son especialmente notables en la economía donostiarra. La apuesta desmesurada realizada en los últimos años por el sector servicios ha traído graves consecuencias. Las nuevas actividades económicas al servicio del turismo han transformado la estructura productiva de la ciudad y los sectores primario y secundario están muy debilitados o a punto de desaparecer. En consecuencia, la tasa de paro en Donostia se ha disparado en relación con las demás capitales vascas.

Hay que aprovechar este esfuerzo colectivo que estamos haciendo estos meses para acometer una nueva redistribución de los sectores económicos y reducir así la gran vulnerabilidad de la que ha adolecido la economía de Donostia ante los vaivenes de los mercados globales.

Tenemos que re-direccionar la economía donostiarra y ponerla en conexión con las necesidades de la ciudadanía, y para ello es necesario recuperar los equilibrios entre los diferentes sectores. Es decir, hay que diversificar la economía, de forma equilibrada, y siempre en el marco de un modelo de desarrollo sostenible.

En este sentido, son valores que defienden las siguientes propuestas y medidas:

  • Proximidad, público y bien común.
  • Consumo local, producción local y distribución local.
  • Creación de empleo de calidad y sostenible.

Áreas de actuación:

Industria manufacturera: identificar y desarrollar la producción industrial imprescindible para asegurar la satisfacción de las necesidades locales y bienestar de los donostiarras. Hay que hacer un análisis general de las cadenas de valor de la industria donostiarra, priorizando itinerarios productivos más cortos y seguros. Al mismo tiempo, hay que analizar las capacidades de la industria ante posibles crisis (sanitarias, ecológicas...). Es decir, hay que analizar las posibilidades que ofrecen las empresas donostiarras para poder reconvertirlas, si llegara el caso, en productoras de equipamientos necesarios en situaciones de emergencia .

Investigación + Desarrollo + Innovación. Hay que poner el conocimiento y la experiencia de los centros tecnológicos en beneficio del interés general. Se debe impulsar la I+D+i y la colaboración activa entre la industria, la agricultura, el comercio y el sector público. También hay que fomentar la gestión pública de las oportunidades económicas que puedan surgir a través de la tecnología Smart.

Sectores económicos para la transición ecológica. Hay que desarrollar y fortalecer los sectores relacionados con la transición ecológica (energías renovables, medio ambiente, economía circular, lucha contra el cambio climático...).

Economía Social Transformadora. Oficina de fomento del cooperativismo: creación de un servicio de apoyo al emprendimiento cooperativo, a la cooperativización de empresas y a las transmisiones empresariales en la sociedad municipal Fomento de San Sebastián. Y en las líneas subvencionales hay que priorizar las empresas basadas tanto en el sistema cooperativo como en la economía social.

Sector del cuidado de personas (Ver punto 2). El fortalecimiento del sector económico de los servicios de cuidado de personas es uno de los pilares de un desarrollo sostenible. Para ello, se necesitan subvenciones para reforzar la profesionalización, mejorar las condiciones laborales y la formación, y fomentar la investigación en el ámbito.

Turismo. La crisis que padecemos ha demostrado la dependencia que ha desarrollado nuestra economía respecto a una industria turística totalmente volátil. En este sentido, es necesario promover nuevas empresas como alternativas multisectoriales que permitan una menor focalización de la economía en el turismo.

Reparto del trabajo: se prevé una importante pérdida de empleo en el sector y para reducir esta pérdida de empleos hay que fomentar que el resto de puestos de trabajo se reparta, reduciendo las horas de trabajo sin pérdida de retribución salarial.

Comercio local. Además de fomentar el consumo local, el comercio local o minorista es un importante elemento para potenciar la producción y distribución local. En este sentido, las medidas dirigidas a apoyar al comercio local son imprescindibles para aprovechar las posibilidades y ventajas que ofrece una economía de escala vecinal.

Ayudas para adaptarse a las nuevas necesidades: ayudas para la digitalización de servicios y la creación plataformas on line.; nuevos servicios para la creación de puestos de trabajo (plataformas de distribución de gestión pública para la prestación del servicio a domicilio); medios para favorecer el cambio de hábitos de consumo (bonos de comercio, moneda local...); mecanismos de defensa contra la competencia desleal (prohibición de apertura de grandes comercios en festivos, paralización de proyectos de grandes establecimientos comerciales y no concesión de nuevos permisos...)

Cultura. La precariedad en la industria cultural vasca es un problema estructural, pero la crisis provocada por Covid-19 ha agravado enormemente este problema. Para responder a las urgencias del momento hacen falta adoptar medidas ya, pero junto a ellas, hacen falta medidas estructurales que refuercen también el sector y la propia vida cultural. EH Bildu propone que en las actuaciones y festivales que organice, participe o colabore el Ayuntamiento, especialmente en los más grandes (Jazzaldia, Quincena, festivales de cine, Gazteszena...), se prioricen las creaciones y actuaciones de creadores locales. Más aún, se impulsará y priorizará la creación en euskera cuando el canal de creación cultural sea hablado o escrito.

Sector primario. Hay que crear puestos de trabajo y garantizar unas condiciones laborales dignas para la consolidación del sector agrario en la ciudad: ofrecer ayudas y medios para reforzar los procesos de sustitución en los caseríos; tomar medidas para recuperar la actividad del sector pesquero; desarrollar espacios públicos de transformación de alimentos locales...

Al mismo tiempo, se debe facilitar la recepción y comercialización de los productos: asegurar un lugar preferente y condiciones dignas en los mercados urbanos (La Bretxa, San Martín); reforzar ayudas para la organización de nuevos mercados; dotar a los comedores públicos (escuelas, residencias de personas mayores...) con productores locales; mejorar la comunicación entre baserritarras y comercios locales; ofrecer ayudas para facilitar y fomentar la actividad de los grupos de consumo; revisar los servicios a domicilio...

Contratación pública. Hay que asegurar condiciones laborales dignas en la contratación pública. En este sentido, es necesario activar las propias inspecciones municipales para garantizar la prestación de las condiciones sanitarias y de seguridad en los servicios municipales, especialmente en las subcontratas y servicios auxiliares.

5. Plan de choque Movilidad

6,5 millones de euros

Una de las consecuencias más evidentes de la pandemia Covid-19 en nuestras vidas ha sido la reducción de la movilidad. El uso de los coches y del transporte público ha disminuido en época de confinamiento y, en el proceso de desescalada, cada vez más ciudadanos/as han apostado por la bicicleta y por ir a pie.

Durante el confinamiento por estado de alarma, la contaminación y el ruido han disminuido considerablemente debido, en gran medida, a la reducción del transporte privado. En consecuencia, hemos podido ensayar los beneficios que acarrearía la reducción de vehículos a motor en nuestra ciudad.

El uso de la bicicleta y los desplazamientos a pie también han aumentado debido, en parte, a que son medios más seguros desde un punto de vista sanitario y a que se han reducido la longitud de los recorridos. De hecho, la bicicleta se ha convertido en la forma más segura de moverse por la ciudad porque no tiene riesgo de contagio y es un medio de transporte que facilita mantener la distancia física.

La época post-Covid-19 es una oportunidad única para reorganizar la movilidad. Si no aprovechamos esta oportunidad, se corre el riesgo de volver a la situación anterior. El planeamiento urbano hasta ahora se ha centrado el coche y ha concedido la mayor parte del espacio público a carreteras y aparcamientos. Por ello, es imprescindible poner en marcha medidas audaces a corto-medio plazo para avanzar en el diseño de un sistema de movilidad más eficiente y sostenible para nuestra ciudad y el medio ambiente.

Intentar volver a la situación anterior (volviendo a utilizar el coche con la misma frecuencia) es inviable y supondría un fracaso ambiental, social y económico.

Desde EH Bildu creemos que este escenario pospandemia debe servir para conseguir tres objetivos en materia de movilidad:

  • Recuperar la confianza en el transporte público, frente al uso individual del coche privado.
  • Evitar desplazamientos innecesarios. Hemos podido ver que no es absolutamente necesario moverse en coche para realizar algunas tareas.
  • Recuperar espacio de la calzada a favor de bicicletas y peatones para lograr una movilidad más segura y sostenible.

Así, las medidas que proponemos desde EH Bildu para reordenar la movilidad y el espacio público son las siguientes:

Potenciar el servicio de transporte público Dbus: promover la reducicción el uso del automóvil privado y las motocicletas en las ciudades es un reto mundial. Es imprescindible organizar una red de transporte público eficiente, no contaminante, adaptada a la realidad y establecer un servicio atractivo para las personas usuarias.

Convertir Donostia en "ciudad 30" y reducir los límites de velocidad de circulación para garantizar la seguridad y la calidad de vida de la ciudadanía. Establecer velocidades máximas en toda la ciudad de 30 km/h y de 20 km/h en zonas de alta densidad.

Mejorar el transporte público y los bidegorris a los polígonos para limitar el uso del coche privado. Mejorar el servicio de transporte público al Polígono 27, Zuatzu, Igara y parque tecnológico de Miramón y crear carriles bici para poder ir en bicicleta

Ampliación de la red ciclista urbana y extensión táctica de los enlaces con los municipios de al rededor para conseguir corredores de movilidad segura, paliar aglomeraciones en los transportes públicos y fomentar la movilidad activa de la ciudadanía. Para mantener la distancia física que impone la actual crisis sanitaria es necesario adecuar bidegorris (provisionales en un primer momento). Los nuevos bidegorris que se pueden implantar a corto plazo pueden ser el de las avenidas Miracruz-Ategorrieta-José Elosegi y en el vial que une Amara con Hospitales.

Aparcamiento seguro de bicicletas en locales municipales y otros espacios de fácil acceso (aparcamientos municipales, equipamientos). Creación de aparcamientos para bicicletas en centros sanitarios, estaciones de tren y otros espacios de concentración de movilidad, sin afectar al espacio peatonal.

Impulsar servicios de distribución a domicilio en bicicleta, así como para los servicios municipales que se pueda. Con esta medida se reduciría el transporte motorizado en algunas zonas de la ciudad.

Abrir cuanto antes el servicio de bicicleta pública Dbizi, adecuando la oferta a la demanda prevista y cumpliendo con todas las medidas de seguridad e higiene necesarias en la actualidad. Ofrecer a los/as donostiarras un buen servicio de bicicletas públicas para poder desplazarse en bicicleta por la ciudad.

Mejorar la coordinación semafórica para dar prioridad a la seguridad de los/as peatones. La coordinación semafórica existente está hecha en muchos casos en beneficio de los coches, su revisión y adaptación a la prioridad peatonal y ciclista es necesaria si se quiere fomentar el nuevo modelo de movilidad.

Extender la cobertura del sistema Mugi de forma especial a las personas en paro. Durante el confinamiento Donostia ha registrado un incremento del paro del 25% y tenemos que tener en cuenta que estamos en los inicios de la crisis y que el número de parados puede tender a aumentar. Por lo tanto, además de la actual Mugi Social, pedimos que se amplíe de forma especial la cobertura del sistema Mugi.

Bulevarización y peatonalización. Establecimiento de medidas provisionales con el objetivo de mantener la distancia física establecida por las autoridades sanitarias. Pero tras las medidas provisionales, habría que seguir avanzando en la peatonalización progresiva del casco urbano. Proponemos que se generalice las calles exclusivas para la circulación de transporte público, distribución de mercancías, transporte de urgencia, transporte privado para personas con movilidad reducida o circulación de residentes. El objetivo es que en estos nuevos espacios semi-peatonales se puedan realizar diferentes actividades y no solo utilizarlos como espacios para la circulación de vehículos.