AKTUALITATEA

| 2024-03-08 13:31:00

En primer lugar nos gustaría dejar clara nuestra postura contrario a la actual Ley de Extranjería, que obliga a las personas a estar en situación administrativa irregular al menos 2 años para poder regularizarse.

En base a esa norma y en ese periodo de tiempo, es donde se sitúan operaciones  policiales como la ocurrida en Barakaldo el pasado miércoles donde bajo la excusa de ofrecer una protección falsa, la policía empuja a las personas que sobreviven en la calle a perder sus lugares seguros, sus pertenencias  y ponen  en riesgo  su seguridad y estancia en el país.

Actuaciones totalmente contrarias al compromiso  adquirido por el Ayuntamiento de Barakaldo tras su adhesión en el año 2021 al Pacto Social Vasco por la Migración, donde entre otros compromisos estaba  el reforzar la respuesta solidaria y responsable ante las necesidades de las personas migrantes.

Bajo el supuesto argumento de la propia seguridad de las personas en calle, estas operaciones policiales, que cuentan con la colaboración de la policía local, están favoreciendo  la apertura de expedientes de expulsión de personas migrantes, que les pueden suponer consecuencia muy graves en sus proyectos de vida.

Se les identifica por tener un color de piel y por encontrarse en la situación de más vulnerabilidad en que se puede estar: en la calle. Este tipo de identificaciones conlleva graves dificultades en los procesos de regularización cuando no, provoca expulsiones injustas a países de origen que no tienen como resultado sino que las personas vuelvan de nuevo a jugarse la vida en el mar, atravesando Europa o en la valla de Ceuta o Melilla. Las personas migrantes y refugiadas no salen de sus países por gusto, no hacen esos tránsitos por capricho. 

Nos informan desde el Ayuntamiento que el motivo de esta redada era con la  "buena intención" de informar sobre la existencia del albergue en Barakaldo, pero no apuntan que ese albergue solo cuenta con 25 plazas y sistemáticamente está completo.

En Barakaldo hay 2 hechos claros: Que muchas personas  viven en la calle y que la institución  no hacen lo suficiente por evitarlo. Los dispositivos de protección social que existen tienen muchas carencias, pero la fundamental está relacionada con el número de plazas. No son suficientes. Barakaldo lleva meses siendo criticado por las medidas que está tomando  en relación a la atención a personas en exclusión social  (falta de plazas de alojamiento, comedor y  duchas, cierre del albergue para mujeres, finalización del servicio de atención del equipo de calle)

Queremos una institución al servicio de la gente, que proteja en primer lugar a las más vulnerables. Queremos un Barakaldo que cuide dignamente a toda su ciudadanía y las redadas conjuntas para "limpiar el pueblo" de personas sin hogar (también ciudadanos/as barakaldeses/as) no encajan en esa idea.

Sí lo hace, apostar por políticas sociales y por la justicia social para que ninguna persona viva en la calle. Eso, sí es una práctica cuidadora  de una  sociedad solidaria. Ocultar el problema y criminalizar a las personas, no lo es y por eso, lo rechazamos profundamente.

En Barakaldo, a 8 de marzo de 2024