AKTUALITATEA


| 2024-12-17 12:44:00

Hace un par de semanas, el Ayuntamiento anunció la puesta en marcha de la nueva campaña de Bonos de Consumo para potenciar el pequeño comercio. Desgraciadamente, tras la denuncia realizada por los agentes locales, fuimos conscientes de que la versión en euskera de la web para la gestión de los bonos estaba llena de errores. Consecuencia de la despreocupación de este Ayuntamiento para con el euskara.

En consecuencia, el presidente de Inguralde cerró inmediatamente la web y pidió disculpas, explicando que a partir de ahora se pondrían en marcha protocolos estrictos. EH Bildu, consciente de que no era la primera vez, además de denunciar los hechos, realizó dos peticiones al Equipo de Gobierno:

Por un lado, convocar una comisión de euskara para evitar que se repitieran estas situaciones y poder acordar una intervención integral a nivel municipal. Y por otro, preguntamos quién decide dónde y cómo se aplicarían esos protocolos anunciados por el presidente de Inguralde.

El Equipo de Gobierno, nos ha comunicado que no se va a convocar ninguna reunión porque ha sido un problema "aislado". Y que, además, estos protocolos corresponden únicamente a la organización Inguralde. Por lo que sólo se decidirán y aplicarán en ella.

Con todo ello, EH Bildu quiere manifestar:

Que la actitud de este Equipo de Gobierno para con el euskera está siendo vergonzosa, permitiendo la vulneración de los derechos lingüísticos y evidenciando su falta de interés en abordar este problema de forma integral. Esto no es un caso aislado, ya que hemos visto repetidamente ataques contra el euskera en Barakaldo. Desde la documentación de la web oficial hasta las máquinas de los Servicios de Atención Ciudadana o las actividades del Mercado Municipal.

Por otro lado, pedimos al Equipo de Gobierno que reconozca las deficiencias existentes y ponga en marcha espacios de colaboración. Porque nos parece incomprensible que mientras se está en un proceso de aprobación del nuevo Plan de Euskera, un Organismo Municipal esté elaborando sus propios protocolos, sin ningún tipo de coordinación, coherencia y estrategia en el ámbito público.