El pleno de Sopela con el voto a favor de EHbildu, Elkarrekin Sopela y AVS, pero con el voto en contra del PNV mostro su apoyo a los y las trabajadoras de FCC Aqualia (la representante del PSE no pudo asistir al pleno)
FCC Aqualia es una subcontrata del Consorcio de Aguas que da servicio a las localidades de Bakio, Barrika, Berango, Derio, Erandio, Fruiz, Gamiz-Fika, Gatika, Gorliz, Larrabetzu, Laukiz, Leioa, Lemoiz, Lezama, Loiu, Maruri-Jatabe, Morga, Mungia, Plentzia, Sondika, Sopela y Urduliz y su labor consiste en el mantenimiento y reparación de la red de agua de abastecimiento; esto es, cuando hay un problema de suministro de agua, los y las trabajadoras de esta subcontrata tienen la responsabilidad de arreglarlo bajo el mando del Consorcio.
El Consorcio de Aguas tiene el territorio vizcaíno dividido en tres lotes y, por lo tanto, existen otros dos lotes que realizan el mismo trabajo en otras zonas de Bizkaia; pero mientras que a los y las trabajadoras de esos otros dos lotes se les aplica el Convenio de Construcción de Bizkaia, a los de nuestra zona se les aplica el Convenio Estatal.
En consecuencia, las condiciones laborales son mucho peores y en tablas salariales hay una diferencia aproximada del 50%. Lo mismo ocurre con la antigüedad, IT, licencias, jornada, pluses, etc. Los y las trabajadoras de FCC Aqualia piden la equiparación, sobre todo salarial, con sus compañeros y compañeras de las otras dos zonas de Bizkaia y para ello tienen prevista una huelga que durará del 4 de junio al 30 de junio, pero que, de no resolverse, podría prolongarse durante los meses de julio y agosto.
El Ayuntamiento de Sopela muestra su solidaridad con el personal dedicado al mantenimiento y reparación de la red de agua de abastecimiento y se adhiere a la principal reivindicación de los y las trabajadoras: “mismo trabajo, mismas condiciones laborales”. En consecuencia, el Ayuntamiento de Sopela hace un llamamiento al Consorcio de Aguas y a la empresa gestora del servicio para que trabajen en todo lo que esté en su mano para solucionar este conflicto a la mayor brevedad posible.
El PNV voto en contra argumentando que es una empresa privada y que el ayuntamiento no debe ni puede intervenir, que no es de su competencia y que el convenio colectivo a negociar es resultado exclusivo de la negociación entre la empresa y el comité de empresa.
Esconderse en una retórica de competencias cuando en otras partes de Bizkaia el mismo trabajo tiene unas condiciones laborales mucho mejores y obviar que el ayuntamiento de Sopela (como el resto de ayuntamientos) son miembros del consorcio de aguas es una excusa para defender a la patronal.