La pasada semana, el PNV presentó una propuesta para renovar la Ordenanza de civismo de Leioa sin consenso previo y sin ningún tipo de participación del resto de grupos políticos, de la ciudadanía y del asociacionismo leioaztarra. Ni siquiera el PSE, sus socios de gobierno, que se abstuvieron, habían participado en la elaboración de la propuesta.
Esta ordenanza regulará como la ciudadanía puede usar el espacio público, y como debemos hacer uso de los derechos fundamentales en el municipio. Creemos que es una Ordenanza importante que no puede nacer de la imposición, sino que debe caminar buscando la mayor participación posible y con el objetivo de alcanzar el máximo consenso posible. Creemos que la participación de la ciudadanía y la gobernanza cooperativa son unos instrumentos esenciales para avanzar como municipio y comunidad.
EH Bildu ha presentado una enmienda a la totalidad devolutoria, es decir, solicitamos al PNV que retire la propuesta presentada y que comience un nuevo proceso donde se facilite la participación del resto de fuerzas políticas, asociaciones, organizaciones sociales y ciudadanía. La actual propuesta carece de consenso previo y participación.
Nos encontramos ante una ORDENANZA MORDAZA. Percibe el espacio público como algo que es propiedad del Ayuntamiento y que la ciudadanía no podemos utilizar con libertad. En vez de promover una utilización del espacio público responsable, no hace más que un catálogo muy extenso de actitudes prohibidas. La normativa tiene las siguientes “perlas”: solo se puede jugar en parques infantiles, fuera de ahí casi todo prohibido y sancionado, jugar al balón, con el patín, con globos de agua…; no se puede comer en los parques, no se puede cantar en la calle, no se puede tocar un instrumento musical, no se puede hacer una pequeña obra de teatro, no se puede poner una mesa vecinal informativa, no se puede colocar carteles, no se puede andar en los parques de noche… y un largo etcétera de prohibiciones inimaginables.
Una ordenanza que no respeta el principio de tipicidad, principio jurídico que exige que las leyes y normas definan de manera clara y precisa las conductas que constituyen una sanción o delito. Regula apartados ya recogidos y sancionados por otras normas con mayor valor legal, por lo que se rompe con el principio de Non bis in idem, principio jurídico por lo que las personas no deberían ser castigadas dos veces por el mismo hecho causante.
Una ordenanza donde reina la arbitrariedad, es decir, donde el capricho y la decisión de las autoridades va a primar sobre los fundamentos objetivos y la justificación racional.
El espacio público es un bien colectivo y comunitario. El Ayuntamiento debe impulsar su uso, con la intención de mejorar la vida en comunidad y la participación socio-política de la ciudadanía, promoviendo el uso proporcional y en respeto con el resto de la ciudadanía. El PNV leioaztarra va en la dirección contraria: prohibir, prohibir y seguir prohibiendo y castigando. Para ello utilizan la misma concepción del franquista Fraga Iribarne: La calle es mía.
EH Bildu seguirá trabajando a favor de una gobernanza cooperativa, promoviendo la participación real de la ciudadanía, y promoviendo el uso del espacio público en condiciones de libertad e igualdad. Si el equipo de Gobierno sigue en su pretensión de aprobar esta Ordenanza Mordaza, animamos al asociacionismo y a la ciudadanía a presentar alegaciones, y nos comprometemos a derogarla cuando lleguemos al Gobierno Municipal.