AKTUALITATEA


| 2023-11-22 11:40:00

Los datos que recogen diversos informes oficiales constatan que hay mucho margen de mejora en los servicios de cuidados municipales del Ayuntamiento de Donostia. Unos recursos que desde EH Bildu vemos necesario revisar y reorientar a fin de que los y las donostiarras sean cuidadas en sus domicilios en coherencia a esos informes. Lo que proponemos hoy es un paquete de medidas viable y aplicable a partir del 1 de enero de 2024, con mejoras en la calidad del servicio y en las condiciones de las profesionales cuidadoras.

 

La concejala y senadora Olaia Duarte ha afirmado que «estamos a tiempo» de mejorar un servicio básico que ha de aspirar llegar al máximo número de personas. En cualquier caso, ha subrayado que «el sistema de cuidados vasco requerirá de una reflexión mucho más profunda y alineada con el movimiento feminista, como el propio colectivo demanda, y demás agentes implicados, que tenga en cuenta los recursos de competencia foral y del Gobierno Vasco y, también, que contemple la reforma del sistema de ciudados de centros y residencias».

 

Cuando hablamos de cuidados hablamos de responsabilidad compartida, de las prioridades sociales y de su coste económico y personal. «Y han sido las familias en general, pero las mujeres en particular (madres, hijas, hermanas, parejas), quienes han asumido esta función. Esta asignación de tareas se realiza desde una perspectiva patriarcal muy arraigada que es necesario abordar y que se traslada a las condiciones del cuidado formal, asalariado», ha recordado.

 

Las necesidades de cuidados van en aumento, sobre todo, en ciudades envejecidas como la donostiarra, en la que la tasa de envejecimiento de la ciudad es del 25,3% y la población joven ha disminuido más del 14% en las dos últimas décadas.

 

Tal y como se refleja en el informe sobre el sistema de atención a la dependencia publicado este mismo mes por la Asociación de directoras y gerentes de Servicios sociales, la atención a la dependencia retrocede en la CAV, ya que ha aumentado la lista de espera para obtener el reconocimiento a tener derecho a ciertos servicios de ciudado y la de aquellos/as que teniendo reconocido ese derecho, aguardan la prestación en una lista de espera. Tanto, que 1.346 de los que esperaban han fallecido este año entre enero y mayo. Además, esa lista de espera no se está reduciendo sino que ha aumentado un 4,7% desde el 2022.

 

Tendemos la mano hacia la construcción del modelo de cuidados

 

En este contexto, cabe recordar que EH Bildu ha presentado en este Ayuntamiento reiteradamente propuestas a favor de un modelo de cuidado público y digno, en colaboración con diversos agentes sociales de la ciudad durante los últimos 8 años. Las propuestas, cabe recordar también, han sido rechazadas en su mayoría. «Ahora que a las puertas de la huelga feminista del 30 de noviembre el alcalde parece querer hablar de cuidados y que los datos reflejan una necesidad urgente del cambio del modelo, tendemos la mano hacía la construcción del modelo de cuidados a domicilio donostiarra, dejando de lado palabras vacías, como la declaración institucional presentada por el PNV esta semana que no habla ni de derechos laborales ni trae medidas concretas. Queremos abrir el camino a medidas reales y viables», ha reiterado Duarte.

 

La semana pasada, en el congreso sobre cuidados organizado por el Gobierno de Lakua en Tabakalera, el propio Eneko Goia aspiraba a que Donostia sea «referente por su modelo de bienestar, desarrollando una estrategia para una mejor atención en el hogar», haciendo referencia a la importancia del Servicio de Ayuda Domiciliaria. Resulta curioso, sin embargo, que los datos demuestren una reducción importante en su presupuesto. Un dato significativo es que del dinero previsto para el servicio en 2023 (10.040.717 euros), finalmente se destinarán 8.787.980,71 euros. Esto ocurre porque el servicio no es capaz de cubrir todas las necesidades y las familias solicitantes terminan asistiendo al sistema privado.

 

 

AÑO

2022

2021

2020

2019

Personas usuarias

1.927 hogares

1.826

1.901

1.788

Número de horas de atención

401.674

424.386,35

433.619,80

458.035,50

 

 

Del análisis del servicio realizado tanto por el Ayuntamiento como por la empresa licitadora en 2022-2023, y de los datos facilitados por la propia concejala delegada de servicios sociales en el seno de la Comisión de este mes se desprende lo siguiente:

 

-Se ha incrementado el número de personas usuarias que utilizan el servicio exclusivamente de forma temporal y urgente hasta obtener la prestación económica de asistencia personal o para cubrir los periodos de vacaciones del personal fijo que tienen contratado. Prueba de ello es que el 50% de las personas usuarias mantienen el servicio durante menos de 10 meses.

 

-En el 13,54% de los hogares que tienen contratado el servicio se realiza una atención de 30 minutos; por ello, se producen muchos cambios en la jornada de las auxiliares. Además, tienen contratos indefinidos de apenas 12 horas semanales, con la precariedad que esto supone.

 

-Se han incrementado las bajas de las personas usuarias que realizan el máximo copago por el servicio, ya que los cuidados contratados en el mercado privado siguen siendo más baratos en perjuicio de las personas cuidadoras.

 

En la legislatura 2011-2015, bajo la alcaldía de Juan Karlos Izagirre, se estableció por primera vez un precio público al Servicio Municipal de Ayuda a Domicilio y se mejoró sustancialmente el convenio laboral de las auxiliares.

 

Y estos dos últimos años, aunque el Gobierno Municipal ha tratado de mejorar el Servicio de Ayuda a Domiciliaria, con una estrategia de cuidados de larga duración, es evidente que «es insuficiente». Según ha detallado Duarte, «esta estrategia se ha aplicado solo a las personas usuarias del Servicio de Ayuda Domiciliaria en determinados barrios (Egia, Gros y Distrito Este) y a 40 de 342 auxiliares, es decir, el servicio no se ha ampliado».

 

Sobre el servicio de atención y asesoramiento a empleadas de hogar que ofrece este Ayuntamiento a través de Sos Racismo en la Casa de las Mujeres de Donostia, y donde se atienden unas 10 mujeres al mes, en los informes se constatan vulneraciones de derechos laborales, entre otros. «En estos casos la opacidad del trabajo de hogar dificulta enormemente la intervención en defensa de las condiciones laborales, y aquí es donde tiene que entrar la administración pública, sobre todo, si esas trabajadoras están contratadas gracias a una prestación económica de la ley de dependencia», ha instado Olaia Duarte.

 

Medidas concretas a aplicar a partir de 2024

 

«Si hay voluntad política esta batería de medidas es posible», ha defendido Duarte sobre las propuestas que pone sobre la mesa. Ha anunciado, además, que EH Bildu las presentará en el Pleno de mañana como «medidas de transición» que tendrán continuidad los próximos meses “gracias a un trabajo que realizaremos junto a los colectivos de la ciudad, como sindicatos, empleadas de hogar, movimiento feminista, familiares...».

 

1.- Realizar un estudio sobre el Servicio de Ayuda Domiciliaria para analizar la tendencia a la baja, dado que las personas usuarias no permanecen en el servicio más de 10 meses. Después, habría que proponer las mejoras necesarias tanto en el reglamento de 2019 como en el precio público.

 

Se puede mejorar considerablemente el servicio ampliado los objetivos del mismo e incluyendo a nuevos perfiles de familias con necesidades de cuidado, así como aumentando las horas, ya que a día de hoy la prestación máxima es de 4 horas diarias los 7 días de la semana (28 horas semanales).

 

2.- Elaborar un informe con perspectiva de género sobre las personas cuidadoras que trabajan en el Servicio de Ayuda Domiciliaria para realizar un análisis de sus condiciones laborales y las consecuencias de la temporalidad en las trabajadoras. Recordemos que son 342 mujeres con una media de edad de 56 años.

 

3.- Realizar un análisis en el Barómetro de Economía Urbana del próximo año, en el apartado de economía urbana, sobre el sector de los cuidados, que resulta estratégico en función de las características demográficas de nuestra ciudad.

 

4.- Aplicar la estrategia de cuidados de larga duración a todas las auxiliares de ayuda domiciliaria y aumentar los recursos técnicos y profesionales en todos los centros de servicios sociales municipales. Llegaríamos a más donostiarras que puedan tener necesidades de cuidado y se ofrecería una atención universal en todos los barrios.

 

5.- Realizar un mapeo por barrios de la fragilidad y la dependencia para valorar quién necesita cuidados y de qué tipo.

 

6.- Ampliar el servicio de asesoramiento a empleadas de hogar ofrecido en la Casa de las Mujeres y dotar de una infraestructura adecuada a las técnicas que realizan este trabajo. Es muy complicado dar una respuesta adecuada que satisfaga las expectativas de las trabajadoras en citas con un tiempo máximo de 45 minutos, y más si se tiene en cuenta que estas tienen la necesidad de contar su situación y de que se les escuche de una forma activa.