AKTUALITATEA

| 2023-09-14 13:38:00

Asistimos con incredulidad al discurso adoptado por este Gobierno Municipal, que ha

hecho suyas unas afirmaciones y propuestas que desde EH Bildu llevamos tiempo

poniendo sobre la mesa con el objetivo de atajar las consecuencias de la saturación de

hospedajes turísticos en nuestra ciudad.

Se refieren al sector turístico como algo necesario a preservar, pero no ocultan la

necesidad de atenderlo, controlarlo, domesticarlo. Son palabras textuales empleadas

por este equipo de Gobierno en la reciente exposición pública sobre la modificación del

Plan General para la regulación de los usos de hospedaje turístico.

Una vez celebrada la exposición pública, desde EH Bildu, su portavoz en el

Ayuntamiento, Juan Karlos Izagirre; y el concejal Ricardo Burutaran han realizado en

rueda de prensa una lectura del contenido y subrayado la letra pequeña, que no es

poca.

«Nos ha sorprendido gratamente que el Gobierno Municipal acepte de manera tan clara

el descontrol que ha habido estos años en el tema del crecimiento turístico, a tenor de

los objetivos que se marcan en su propuesta compartida este pasado martes. De un

discurso negacionista, pasan a reconocer que se debe controlar este crecimiento, lo que

lleva reclamando EH Bildu desde hace años», ha expresado Izagirre.

En cualquier caso, creemos que la propuesta llega tarde y carece de ambición. Somos

escépticos, es difícil creer que con las medidas propuestas se vaya a conseguir

efectivamentre que no se implanten nuevas actividades de tipo hotelero incluso en

zonas saturadas. «Es difícil creer que pueda solucionar la situación actual quienes nos

han traído hasta aquí».

Las intenciones se quedan cortas por varios motivos. En primer lugar, no es suficiente

declarar como zonas saturadas Gros, Antiguo y Centro. Es fundamental prever que las

zonas colindantes se verán afectadas también. Hablamos de Amara, Egia, Arriola,

Ategorrieta e Intxaurrondo.

Del mismo modo, nos resulta incomprensible e intolerable que en zonas saturadas se

planteen excepciones para abrir hoteles en edificios singulares como conventos y villas.

Por lo tanto, cabe decir que en esta ciudad se van a poder seguir abriendo hoteles y

además en zonas saturadas. Desde EH Bildu defendemos que la implantación de una

actividad hotelera no puede utilizarse como argumento central para defender que es la

única vía para la salvaguarda del patrimonio arquitectónico o cultural, como han

defendido desde el Gobierno Municipal.

Además, las excepciones pueden ser ilegales por discriminatorias. El planeamiento

prohibe expresamente un trato diferenciado respecto a determinadas edificaciones

puntuales sin justificar.

La prohibición de abrir nuevos pisos turísticos en toda la ciudad forma parte de la

propuesta y, si bien la compartimos, por supuesto, el hecho de que sea un borrador y no

una decisión cerrada nos mantiene alerta. Haremos que se cumpla. A este respecto,

cabe una pregunta: ¿Qué hay de las autorizaciones concedidas hasta ahora? No se

citan en el documento, como tampoco se hace referencia a las autorizaciones que no

están en activo. ¿Qué pretende hacer con ellas el Gobierno de Eneko Goia?

Las autorizaciones deberían exigir las condiciones que se piden en otras actividades.

A la vista está que los problemas generados por estas viviendas son considerables.

Cabría admitir que fue un error liberalizar la norma de la primera planta,

responsabilidad del anterior y actual Gobierno.

«Los objetivos que se ha marcado este equipo de gobierno no son asumibles con las

medidas que ha anunciado. Por eso insistimos en la necesidad de un acuerdo porque

tenemos propuestas que sí hacen viables estos objetivos», ha dicho Izagirre.

Por su parte, el concejal Ricardo Burutaran, ha ofrecido detalles de las propuestas que

plantea EH Bildu, como asumir que las zonas saturadas lo son para todo tipo de

hospedajes y que no caben excepciones sospechosas. «Las excepciones sobran y se

deben ampliar las zonas sensibles, porque el riesgo de llevar el problema a las zonas

colindantes sigue existiendo. Este riesgo es menor en cuanto mayor superficie tiene la

zona protegida. Es como una mancha de aceite que se va extendiendo», ha defendido.

También cabe reparar en todo el suelo no urbanizable, que queda libre de esta

propuesta que nos trae el Gobierno Municipal.

Por último, reparemos a los plazos. Para que la moratoria se pueda prolongar un año

más (hasta abril 2025) se debe aprobar esta modificación inicial del Plan General para

abril del año que viene, y van muy justos de tiempo.