Desde el mes de febrero, los trabajadores y trabajadoras de Acción Social están llevando a cabo una dinámica de movilizaciones, con convocatorias de paro y huelga en marzo y abril. Hoy y mañana, por ejemplo, son jornadas de huelga. Desde el principio, las dinámicas de movilización han recibido un amplio apoyo del personal del departamento, ya que las demandas y reivindicaciones planteadas no son nuevas, al igual que no lo es la denuncia de saturación que sufre el departamento. En 2017 ya se detectó un alto riesgo para la salud del personal de Acción Social, debido a la sobrecarga de trabajo. Lamentablemente, desde entonces la situación no ha mejorado y, mientras que la demanda en servicios sociales ha aumentado en gran medida, la ampliación de plantilla ni siquiera se acerca a ese aumento.
En este sentido, los trabajadores y trabajadoras señalan que con los recursos de los que disponen «no se pueden garantizar los derechos fundamentales de las personas en situación de vulnerabilidad». En muchos casos, las llamadas que realiza la ciudadanía a estos servicios no reciben respuesta, hay que esperar semanas para conseguir una cita, las ayudas económicas se retrasan, resulta imposible hacer el seguimiento necesario en los casos de infancia... Este exceso de carga de trabajo que sufre el personal tiene un impacto directo en la atención que recibe la ciudadanía que acude a los Servicios Sociales, y la situación es muy preocupante.
Así se ha expresado hoy en rueda de prensa la concejala de EH Bildu Izar Hernando, después de que el pasado 10 de abril solicitara en comisión a la concejala delegada información sobre la situación del servicio y de las medidas a aplicar. Ahora, y con el objetivo de buscar una solución, defenderemos en el Pleno que tendrá lugar mañana, día 30, una moción de control.
Tal y como ha recordado Hernando, los trabajadores y las trabajadoras han pedido que se haga un análisis de las necesidades estructurales y organizativas para poder tomar medidas: la implantación de más recursos materiales, la reducción de la ratio por profesional, que la gestión priorice las necesidades de las personas y que se amplíen los equipos de todas las áreas. «Creemos que, para interpretar correctamente estas demandas, debe tenerse en cuenta que Donostia es una ciudad envejecida y que vivimos en un contexto de gran incertidumbre, en el que abundan las necesidades socioeconómicas y en el que las políticas sociales deben asumir un papel protagonista. Los servicios sociales se han convertido ya en los servicios públicos municipales más utilizados por los donostiarras, lo que exige inversiones y reorganizaciones que guarden la proporción necesaria con el bienestar que deseamos».
En los últimos años la demanda del departamento ha aumentado concretamente un 21% y la tendencia es muy ascendente en lo que respecta a la ciudadanía. Por ello, el Departamento debe reforzarse considerablemente, para lo cual proponemos la elaboración de un plan plurianual, ampliando la plantilla en 2026 y ampliándola en los próximos 2 años (se trataría de un plan plurianual o plan hasta el final de la legislatura).
En este sentido, hay que tomar decisiones para mejorar la calidad de los servicios sociales y cuidar a las personas que trabajan en ellos. Así, creemos que hay que combinar medidas tanto a corto como a largo plazo. En cuanto al medio o largo plazo, la concejala delegada se ha comprometido a priorizar las contrataciones de Acción Social de cara al año 2026. Por otro lado, el personal ha elaborado, y nos ha presentado a los concejales y concejalas de todos los grupos políticos, la relación de mejoras que deberían llevarse a cabo en Acción Social. Consideramos que la ampliación y reorganización de la plantilla a medio plazo requiere unas bases consensuadas, diseñadas y analizadas conjuntamente con el personal.
En cuanto al corto plazo, es imprescindible una contratación que alivie la carga de trabajo de las trabajadoras, máxime teniendo en cuenta la inminente llegada del verano. Las fórmulas de contratación son hoy por hoy posibles, ya que económica y jurídicamente existen posibilidades para ello; esto supondría, lógicamente, adoptar la decisión de priorizar el bienestar.
Así las cosas, son tres las demandas que recogemos en la moción de control que defenderemos en el Pleno de mañana miércoles. En primer lugar, instamos al Gobierno Municipal a incrementar de forma urgente los recursos profesionales de Acción Social para atender las necesidades inmediatas de este año. En segundo lugar, que ponga sustitutos durante las vacaciones de los profesionales de Acción Social para que no se acumule más trabajo y no se sature más la atención. Sabemos que las vacaciones no son sustituidas y que el personal está muy sobrepasado (riesgo psicosocial alto, bajas y movilidad alta). En estas circunstancias, las vacaciones son fundamentales; el derecho al descanso debería ser
compatible con no tensionar más un servicio ya saturado. Y en tercer lugar, pedimos al Gobierno de PNV y PSE que elabore un plan plurianual de contratación y reorganización, mediante la creación de una mesa de negociación con el personal y la puesta en marcha de una oferta de empleo para la ampliación de plantilla en 2026.