AKTUALITATEA


| 2019-09-18 09:48:00

La Emergencia Climática va a condicionar – está condicionando ya - la agenda de los próximos años y décadas, ya que supone una de las principales amenazas para nuestro bienestar; un verdadero reto para toda una civilización. La situación actual en el mundo y en Euskal Herria, y el pronóstico a corto plazo, no dejan demasiado margen para el optimismo, pero mucho menos para la inactividad. Para nuestra juventud ya se ha convertido en una preocupación de primer orden, no sólo la emergencia propiamente dicha, sino también la escasa respuesta política que se da al tema.

Durante los últimos años la comunidad científica ha enviado avisos y alertas sobre la evolución del cambio climático. El cambio climático se está produciendo como consecuencia de un vertido masivo de gases de efecto invernadero, cuya principal razón, aunque no única, es la utilización de recursos fósiles que quemamos para mantener el nivel de desarrollo socio-económico. El cambio climático, por tanto, es producto de nuestra acción, y ya hemos empezado a sentir sus consecuencias.

En los informes publicados año tras año tenemos indicios de que la situación se está deteriorando. En los informes publicados por diferentes organismos y grupos de trabajo internacionales se dice —cada vez con mayor claridad— que es preciso realizar una profunda transformación, una verdadera revolución, en las políticas climáticas y energéticas si queremos hacer frente a la situación y no queremos sufrir los efectos más violentos del cambio climático.

Sin embargo, los pasos dados hasta ahora no han sido suficientes, ni siquiera en la CAPV, ya que el vertido de gases de efecto invernadero no se reduce, sino que se incrementa, superando la barrera de 20 millones de toneladas, algo que no se producía desde 2012. Estos datos son altamente preocupantes, ya que el objetivo es conseguir la neutralidad de carbono para el año 2050, pero, en lugar de acercarnos a ese escenario, nos estamos alejando.

El Gobierno Vasco ha declarado la situación de emergencia climática y medio ambiental, y ha anunciado una medida concreta: destinar parte del presupuesto anual a medidas encaminadas a paliar el cambio climático y a medidas de adaptación al cambio.

Son varias las ciudades que han declarado una situación de emergencia climática; por ejemplo, en Francia, Irlanda, Reino Unido, Canadá y Argentina. Y, Cataluña, Sevilla o Zaragoza, entre otras ciudades, también han declarado una situación de emergencia climática. Sin embargo, Donostia se está quedando atrás, ya que el Gobierno Municipal no ha realizado tal declaración.

Desde el grupo municipal de EH Bildu pensamos que al gobierno de Eneko Goia ya se le han acabado las excusas para no declarar la emergencia climática en Donostia, de hecho, sus propios compañeros del PNV en el Gobierno Vasco ya la han declarado. Tendrá una oportunidad inmejorable para rectificar en el pleno de septiembre, porque EH Bildu va a registrar una moción pidiendo también aquí la declaración de emergencia climática.