AKTUALITATEA


| 2019-10-11 12:56:00

En primer lugar, queremos felicitar a la Policía municipal de Bilbao por su 175 aniversario. Ayer y hoy estamos asistiendo a las jornadas que han organizado en Bilbao y en ellas se están abordando temas relacionados con el modelo de policía de proximidad o policía comunitaria. Las diferentes experiencias de Lisboa, Londres y Barcelona abundan en casos prácticos muy interesantes.

Desde EH Bildu Bilbo defendemos un modelo de policía de cercanía, y por ello firmamos en 2018 el Pacto por la Seguridad, porque creemos que es un marco donde se puede remar a favor de un modelo de seguridad cercano a las y los vecinos, descentralizado en los barrios, y capacitado en prevención. 

Consideramos que hay que apostar por este modelo que defenderá los derechos y libertades de todos y todas las Bilbaínas, y, aunque parece que todos defendemos un mismo modelo de policía de proximidad, habrá que redactar bien la letra pequeña, para que la realidad no nos demuestre luego lo contrario.

Tal y como está quedando de relieve en estas jornadas, la policía local debe reenfocar su visión: no hay  que trabajar para la ciudadanía, sino más bien junto a la ciudadanía. Esa es una máxima que obliga a repensar todo el modelo: la persuasión, el acompañamiento, el diálogo, el trabajo continuado junto a diferentes comunidades conducen hacia la reducción del uso de la fuerza.

Estas jornadas, que tienen por título “La participación de la ciudadanía en la elaboración de las políticas públicas de seguridad y su evaluación”, dejan en evidencia que hay que cambiar la cultura policial heredada de tiempos pasados, y que, para ello, es imprescindible un cambio en la formación y diagnósticos de la situación compartidos con la ciudadanía.

En este sentido, valoramos positivamente el ejemplo de la ciudad de Lisboa. Según nos han explicado, se crean foros sobre seguridad por cada distrito, con la participación de los y las vecinas, y trabajan con regularidad mensual. Estos grupos identifican y consensuan problemáticas del barrio, marcan prioridades y hasta participan en la elaboración del perfil de policía comunitaria.

Desde EH Bildu, tomamos nota de los temas que se están abordando en estas jornadas, y coincidimos con los ponentes en que hay que cambiar el chip. Apostemos por una policía municipal que trabaje, no tanto para, sino más bien con los y las vecinas. Vivir en Bilbao en libertad y con seguridad es trabajo de todos y todas. Para ello, es necesaria mucha formación y mucho trabajo en común con la sociedad civil.