AKTUALITATEA


| 2021-09-17 12:11:00

Araba. 2021-09-17 | Tras conocer las nuevas medidas adoptadas por el LABI, EH Bildu ha registrado unas preguntas para el próximo Pleno de Control de las Juntas Generales de Araba. La procuradora Claudia Venceslao considera que es hora de revisar la última Orden Foral que regula las visitas y salidas en centros residenciales de personas mayores y personas con discapacidad en Araba.

 

Según el grupo juntero, esta revisión se debería de dar de forma inmediata, y debería basarse en dos aspectos fundamentales: priorizar el bienestar emocional de las personas que viven en centros residenciales -posibilitando una vida normalizada parecida a la de las personas que viven en sus propios domicilios- y garantizar que las personas que viven en centros residenciales de gestión privada tienen los mismos derechos que las personas que residen en residencias forales. 

 

“La Diputación, como máxima responsable en el cuidado y atención a personas mayores y personas con diversidad funcional, no debería limitarse a ‘recomendar’ derechos, sino a defenderlos, exigirlos y garantizarlos. No es de recibo que una persona que reside en un centro privado no pueda salir el mismo número de veces que una que reside en un centro público”, ha señalado Venceslao. Ha recordado que las familias y los sindicatos han alertado a la propia EH Bildu de que algunos centros privados asumen esta Orden Foral como una norma que marca máximos y no mínimos: “Las visitas y las salidas de una residencia nunca pueden depender de la voluntad aleatoria de las direcciones de estos centros residenciales”.

 

Por otro lado, EH Bildu considera que hay que revisar los protocolos y planes de contingencia de COVID 19, incidiendo concretamente en aquellos puntos que definen los aislamientos de las personas residentes: “Sabemos perfectamente el deterioro físico, mental, cognitivo y emocional que conllevan estos aislamientos”.

 

“Combatir la entrada del virus en las residencias es una prioridad para las administraciones, pero esta lucha debería de ir encaminada al refuerzo de plantillas, las inversiones en la infraestructura de los centros residenciales y el aumento de inspecciones para garantizar el adecuado cumplimiento de todos los protocolos de seguridad. Los aislamientos, los encierros, y las restricciones en salidas y visitas deberían ser la última medida frente al coronavirus, porque garantizar la salud mental y el bienestar emocional de las personas usuarias debe de tener la misma importancia que asegurar la salud física de este colectivo”, ha sentenciado Venceslao.