AKTUALITATEA

| 2019-12-12

EH Bildu ha defendido hoy en el Parlamento una proposición no de ley que denuncia la apuesta del Gobierno por profundizar en los recortes de la RGI y que exige por ello a Lakua el fin de los recortes y un compromiso a favor de un salario mínimo de 1.200 euros, además de reivindicar la necesidad del marco vasco de relaciones laborales. La votación, sin embargo, ha puesto de manifiesto que el pacto presupuestario entre el Ejecutivo y Podemos ya está en vigor, ya que los nuevos socios de PNV y PSE se han negado a apoyar la propuesta de EH Bildu a pesar de que hasta ahora han venido compartiendo esas reivindicaciones. Por ello, a juicio de Nerea Kortajarena, “lo ocurrido hoy es la primera escenificación de las consecuencias que tiene el acuerdo presupuestario, que limita (a Podemos) las acciones y el poder desarrollar aquello que se dice o el poder hacer aquello que se quiere hacer”.
En esta línea, Kortajarena ha recordado que el acuerdo presupuestario no ha traído consigo el fin de los recortes en la RGI, de manera que en 2020 el Ejecutivo PNV-PSE financiará el sistema RGI con menos dinero que este año a pesar de que la pobreza es cada vez mayor, según el último informe de Cáritas. La parlamentaria de EH Bildu ha denunciado por ello que “Podemos ha negociado si los recortes son mayores o menores, pero recortes al fin y al cabo”, ya que, tal y como ha explicado al respecto, en vez de cumplir la Ley de Garantía de Ingresos de 2008, “ahora la cuantía de la RGI se quiere decidir cada año en una subasta en función de la voluntad política del Gobierno y de quienes negocian con él”, con lo cual las personas perceptoras de esa renta quedan en una situación de absoluta incertidumbre, sin las garantías previstas en la ley.