EH Bildu ha reivindicado hoy la necesidad de establecer un salario mínimo (SMI) de 1.400 euros en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, porque esa es la cuantía que debería aplicarse aquí según los criterios de la Carta Social Europea (60% del salario medio), y, por lo tanto, ha pedido al Gobierno de Urkullu que en la Mesa de Diálogo Social promueva un acuerdo entre empresas y sindicatos para aprobar ese salario mínimo adaptado a la realidad socioeconómica vasca. En este sentido, Arkaitz Rodríguez ha instado a la consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, a que convoque a la patronal y a los sindicatos para promover un acuerdo interprofesional que contemple un SMI de 1.400 euros. Según ha dicho, “la mayoría sindical está a favor, la mayoría social está a favor y parece que la mayoría política también”, ya que en los presupuestos de 2022 el Ejecutivo vasco acordó con EH Bildu promover un acuerdo en esa dirección.
El Gobierno español ha subido recientemente el SMI a 1.080 euros, pero eso, aun siendo positivo, no es suficiente para el País Vasco, porque “aquí –explica Rodriguez– el salario medio es alrededor de un 20% más alto que en el Estado y la vida también es alrededor de un 20% más cara. El salario mínimo que acaban de establecer en España aquí no cumple los criterios de la Carta Social Europea, es alrededor de un 20% inferior a lo que necesitaríamos aquí, según la Carta Social Europea, aquí el SMI debería ser de 1.400 euros”.
El parlamentario de EH Bildu ha advertido de las consecuencias de ese déficit. “El SMI de 1.080 euros aprobado por el Gobierno español no sirve en nuestro país para reducir las brechas de género e intergeneracional, sino que agrava las brechas en el mercado laboral, que afectan a jóvenes, inmigrantes y, especialmente, a mujeres, por lo que mantener el salario mínimo en un nivel tan bajo en nuestro país es dar la espalda a estos sectores, y no hablamos de cuatro gatos: al menos 285.000 personas en la CAV cobran hoy menos de 1.400 euros”.
Rodríguez ha apelado al liderazgo político para establecer de facto un SMI de 1.400 euros en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, ya que, aunque las instituciones vascas no son competentes para establecer un salario mínimo propio por “falta de soberanía”, existe la posibilidad de aprobarlo mediante un acuerdo interprofesional. Asimismo, en las adjudicaciones de la Administración se puede fijar ese requisito, que el salario sea al menos de 1.400 euros. Por lo tanto, ha subrayado el parlamentario de EH Bildu, “se puede hacer incluso sin tener la competencia si hay voluntad política. A falta de soberanía, liderazgo político”.
Para Rodríguez, el del SMI es un ejemplo más de que “necesitamos soberanía para poder hacer políticas adecuadas a nuestra realidad socio-económica. En definitiva, necesitamos poder decidir para garantizar vidas dignas; soberanía es sinónimo de mejores condiciones de trabajo, pensiones o salarios. Negar la soberanía es negar la posibilidad de mejorar los salarios, las pensiones y el bienestar en general”.