AKTUALITATEA


| 2021-12-17 11:37:00

La parlamentaria de EH Bildu Pazis García ha denunciado hoy las condiciones laborales precarias que sufren las personas que trabajan en las obras del Tren de Alta Velocidad (TAV) y del Metro de Donostia y ha exigido a la consejera de Trabajo y Empleo, Idoia Mendia, que lleve a la práctica sus palabras a favor del empleo de calidad e inclusivo, recogidas en la Estrategia Vasca de Empleo 2030. “Lo que se dice en ese documento no se corresponde con la realidad de las condiciones de trabajo existentes en esas dos grandes obras públicas”, ha asegurado García, que ha denunciado, en el caso de las obras del TAV, “la conculcación sistemática de los derechos laborales y de la seguridad y salud en el trabajo: incumplimiento del convenio colectivo de la construcción, excesos de jornadas y horas extras, sobrecarga de trabajo y ritmos abusivos, largas cadenas de subcontratación, etc.”.

La parlamentaria independentista ha alertado de que la precariedad de las obras del TAV se está replicando de igual manera en las del Metro de Donostia y ha manifestado su temor a que la encomienda de las obras del TAV al Gobierno vasco no vaya a significar ninguna mejora en el ámbito de las condiciones laborales. “Es incompatible decir que la apuesta del Gobierno es a favor del empleo inclusivo y de calidad y mirar para otro lado ante la precariedad laboral y falta de seguridad que se están dando en las obras del TAV y del Metro de Donostia”. En esta línea, ha exigido al Ejecutivo que se comprometa a garantizar empleo digno y de calidad en todas las obras públicas para que “no haya que pagarlas también con la salud cuando no con la vida porque se malvive o pueda perderse; no se puede promover empleo precario con dinero público”.

García ha recordado al respecto que 10 trabajadores han muerto en las obras del TAV desde 2008, “muertes evitables” si se hubiesen garantizado condiciones laborales dignas, y ha explicado que casi el 80% de las plantillas que operan en el proyecto del TAV lo integran “personas migrantes que huyen del desempleo y la pérdida de esperanza” en sus países y que encuentran aquí empresas que “se aprovechan de su situación de vulnerabilidad”.