AKTUALITATEA


| 2020-05-29 10:17:00

El pasado 14 de febrero, EH Bildu y Elkarrekin Araba solicitaron la comparecencia del alcalde de Ribera Alta en la Comisión de Bienestar Social para que diese cuenta de la situación actual del edificio donde se iba a ubicar una residencia para personas mayores en el municipio de Pobes.

Dicha comparecencia llegó el pasado jueves día 28, pero EH Bildu considera “inadmisible” la actitud del Señor Berganza en la sede de Juntas Generales. Por ello, el mismo jueves EH Bildu ha vuelto a registrar, junto con Elkarrekin Araba, el requerimiento de su comparecencia en la Comisión de Bienestar Social, para que dé las explicaciones que no ha querido dar ante las representantes de la ciudadanía alavesa. “Reclamamos una solución definitiva para este proyecto en el que se han gastado cientos de miles de euros de las arcas públicas. Exigimos que a la menor brevedad se ponga en marcha un recurso social de gestión pública, que es la única posibilidad justa y legal para rentabilizar esa inversión. Finalmente, hacemos un llamamiento al PNV a que tome cartas en el asunto y exija a su alcalde que deje de jugar al Monopoly con una propiedad pública y acepte la propuesta formulada por Diputación para situar en ese edificio el anteriormente mencionado recurso”, ha señalado la procuradora Claudia Venceslao.

En una nota de prensa, EH Bildu ha recordado que a historia de la construcción de esta residencia es la historia de una chapuza por parte del PNV. El alcalde de este partido decidió edificar en 2012 con dinero público una residencia para personas mayores con 27 plazas. En base al decreto de Cartera de Servicios y Prestaciones Sociales, la competencia en residencias es foral, por lo que cuando se empezó a construir esta residencia, su alcalde, el Señor Berganza, ya era conocedor de que por ley, ese proyecto no era competencia suya. En 2017, el Ayuntamiento renunció a la gestión directa de este proyecto y decidió dejar en manos privadas la finalización de las obras y la gestión de la residencia. Posteriormente, este edificio pasa de ser un centro residencial a una vivienda comunitaria, con muchas menos plazas. La empresa adjudicataria abandona el proyecto, con lo que el edificio lleva años cerrado. “Es decir, el señor Berganzo se embarcó en un proyecto que no era de su competencia y que no podía ni sabía gestionar, derrochando así miles de euros de los vecinos del municipio de Erribera Goitia”, ha denunciado Venceslao.

Por si todo esto no fuera ya de por sí un despropósito, este jueves mismo el Diputado de Políticas Sociales aseguraba en esa misma Comisión, que la Diputación Foral había ofrecido al alcalde de Ribera Alta un salida para el edificio ubicado en Pobes, para abrir un centro de atención a personas mayores con discapacidad intelectual. Sin embargo, y para asombro de todas, el Señor Sola afirmó que el alcalde Berganza había declinado el ofrecimiento. “Nos encontramos después de varios años con un edificio vacío y cerrado, por la testarudez de un alcalde que piensa más en ganar votos que en el beneficio de los vecinos y vecinas de su pueblo”, ha lamentado la procuradora

Para finalizar, EH Bildu ha querido volver a remarcar que el alcalde de Ribera Alta tuvo una actitud “inaceptable” en su comparecencia y que no se dignó a contestar ninguna de las preguntas que se le realizó, aludiendo no saber la información y necesitar tiempo para reunirla. “Reclamamos una solución definitiva para el fallido proyecto de una residencia para la 3. Edad en Pobes y exigimos que a la menor brevedad se ponga en marcha un recurso social de gestión pública en dicho edificio”, ha sentenciado Venceslao.