AKTUALITATEA


| 2019-09-20 20:48:00

Nos hallamos ante una situación de Emergencia Climática que afecta a todos los ámbitos de nuestra vida y que condicionará la agenda de los próximos años y décadas. Existe un consenso científico sobre el tema, según el cual el cambio climático es consecuencia de la emisión masiva de Gases de Efecto Invernadero, y la principal causante de la misma, aunque no la única, es la utilización de recursos fósiles que quemamos para mantener nuestro metabolismo socioeconómico.

En nuestro entorno más cercano y pese a los mensajes de los propagandistas de Gobierno Vasco, el modelo económico impulsado por el PNV, basado en la dependencia de combustibles fósiles, ha supuesto un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Ejemplos conocidos como la puesta en marcha de la planta de Coke en la refinería de Petronor en Muskiz o las incineradoras de Zabalgarbi y Zubieta dan muestra de ello. En lugar de impulsar un modelo que fomente el reciclaje o las energías renovables, se ha impulsado la incineración y la dependencia con los combustibles fósiles, políticas que han estado siempre plegadas a los intereses de la oligarquía económica en detrimento de la salud de la ciudadanía.

Si reconocemos que nos hallamos en una situación de emergencia climática es necesario hablar de responsabilidad. Tenemos una gran responsabilidad en las emisiones de gas que aceleran el cambio climático, y las políticas y planes desarrollados hasta ahora no han logrado revertir la situación. Necesitamos políticas decididas para emprender ese cambio.