AKTUALITATEA


| 2024-03-26 13:05:00

El punto de vista de Eraitz lo hemos conocido a través de la entrevista que le han hecho nuestras/os jóvenes. Por lo tanto, ofrezcamos unos detalles explicados por Unai, que resultan muy esclarecedores para conocer la dimensión del problema y enfocar mejor la mirada de Pello.

Actualmente hay 69.000 personas inscritas en Etxebide esperando recibir una vivienda en alquiler. El número de viviendas ofertadas es de 27.000. Igualmente es considerable el aumento que han sufrido los precios de alquiler, en términos generales. Tomó como ejemplo Gasteiz, por ser la más barata de las tres capitales, y explicó que el precio del metro cuadrado de piso alquilado asciende a 11 euros.

Siendo tan elevada la necesidad de vivienda, la tentación de solucionarla con una receta del siglo XX es grande, es decir, construyendo nuevas viviendas, pero apostó por utilizar las existentes, en primer lugar: en vez de ocupar nuevos solares, densificar los solares ya construidos y explorar las vías de la remodelación de viviendas.

También propuso que la administración pública destinara anualmente X millones a la adquisición de viviendas. Igualmente, propuso lanzar iniciativas público-privadas para afrontar la gran demanda de viviendas en alquiler.

Mirada de Otxandiano

El comienzo de este nuevo ciclo político es marcado por la sincronización de agendas de cambio. Estas agendas recogen los problemas que afectan a nuestra sociedad y las recetas nuevas e innovadoras que presenta EHBildu como solución a ellas. Entre los problemas no debemos olvidar que tenemos una de las tasas de emancipación más bajas de Europa, ni los presentados por Unai: falta de oferta de vivienda en alquiler y el salvaje aumento de precios de estas.

Y para encontrar soluciones a todo ello, necesitamos políticas del siglo XXI; no se pueden proponer las mismas medidas que hace 30 años. Necesitamos gobiernos con claros fines de solucionar problemas; que dispongan de voluntad para cooperar. Debemos arrinconar cualquier conato de resignación, y convencidos de que somos capaces, disfrutaremos de nuestra ambición como revulsivo. Por este camino lograremos que la vivienda deje de ser un privilegio y llegue a ser un derecho cumplido. Así lo reconoce la ley 3/2015 de la vivienda, aquella a la que el PNV votó en contra. Y nosotros nos disponemos a explorar los límites superiores de esta ley, en busca del beneficio para la sociedad.

Ateniéndonos a propuestas concretas, Otxandiano nos ha presentado un decálogo que se resume en dos líneas de trabajo: