La Diputación Foral de Gipuzkoa aprobó en 2018 el plan Babestu 20-30 con la aceptación de las Juntas Generales. En dicho Plan se recoge la necesidad de unificar las acciones de los servicios de bomberos de Gipuzkoa y Donostia, señalando textualmente que "esto significa que en la prestación de los servicios de atención de emergencias se priorizará la atención a la población tan pronto como sea posible, independientemente de la administración competente. Actualmente, los servicios de bomberos trabajan en el ámbito concreto de actuación que les corresponde, de forma autónoma e independiente".
El servicio de bomberos, al igual que este tipo de servicios públicos, es un servicio prioritario en el que tanto su personal como la ciudadanía guipuzcoana se merecen contar con los mejores recursos posibles para que el servicio sea de calidad y que la gestión de los recursos sea lo más eficiente posible.
El citado Plan propone superar el ámbito competencial de la Administración competente y promover una visión global de las emergencias, de forma que todos los servicios presten atención, asistencia o protección en aquellas emergencias que se produzcan fuera de su ámbito administrativo.
Han pasado siete años desde la aprobación de este plan y aún está pendiente la puesta en común operativa, lo que significa que el servicio que ahora se ofrece es mejorable y operable. También debería implicar la elaboración de un plan estratégico para el desarrollo de un servicio integral de emergencias para el territorio.
Por ello, EH Bildu considera imprescindible adoptar esta medida cuanto antes. Más aún, para responder adecuadamente a posibles situaciones de emergencia durante la temporada estival.