EH Bildu ha preguntado en relación al centro de menores migrantes reabierto hace unos meses en Artxanda, en El Vivero, durante el pleno de control de las Juntas Generales de Bizkaia celebrado en Abellaneda. La juntera de EH Bildu, Izaskun Duque, ha planteado dudas en relación a sí todos los niños allí acogidos están adecuadamente empadronados y, por lo tanto, ha apuntado falta de certeza en cuanto a si la Diputación está cumpliendo para que se respeten los derechos fundamentales de todos ellos.
Duque ha cuestionado que estemos viviendo realmente «una situación de excepcionalidad, tal y como viene refiriendo la Diputación que habla de la incesante llegada a Bizkaia de menores migrantes sin acompañamiento familiar. Las cifras dicen otra cosa». Izaskun Duque ha detallado que durante el periodo 1996-2007 el número de menores fue ascendiendo hasta llegar a los 466 en el 2007. En 2018 los menores acogidos en la red eran 600, la misma cifra que en diciembre de 2024.
En base a ello, pone en duda EH Bildu que la red de recursos materiales, personales y económicos disponibles para el área de Infancia esté tan tensionada que no de más de sí. Es en ese contexto precisamente, el de la eventual situación de excepcionalidad, en el que la Diputación aprobó un decreto en diciembre de 2024 que propició reabrir el centro de acogida de El Vivero que no se utilizaba desde 2023. «El caserío sufre un volumen de ocupación mucho mayor del prefijado y, tal y como determinó el Ararteko, no cumple condiciones socio-sanitarias».
EH Bildu valora que más allá de la apertura de centros, «el decreto no permite eludir la obligación legal de la Diputación respecto de los menores, no exime de cumplir con derechos como la tutela legal, el padrón, acceso a la sanidad, a la educación, prestaciones sociales y regulación administrativa. Por el contrario, la Diputación está instaurando un relato que transmite situación de excepcionalidad, y que busca desmoralizar para evitar el efecto llamada».