La portavoz del grupo municipal de EH Bildu, María del Río, y el concejal de esta formación Karlos Renedo han solicitado hoy la apertura de un proceso para la revisión del actual Protocolo municipal frente a Desahucios que es del 2018, puesto que éste ya "no es válido" ante el aumento "desorbitado" de desahucios en la ciudad. Este proceso, según han dicho, debe servir para adoptar una serie de medidas y debe darse junto con los agentes implicados: sindicatos de vivienda, organismos del tercer sector, diferentes áreas del Ayuntamiento, principalmente vivienda y acción social; y el conjunto de las formaciones de la corporación municipal.
Del Río y Renedo han ofrecido hoy una rueda de prensa donde han puesto de manifiesto la "grave" situación de la vivienda en Bilbao. De hecho, según la portavoz, el Servicio Municipal Frente a Desahucios de la ciudad ha pasado de atender 21 solicitudes en 2013 a 233 en 2024, un incremento que "cada vez afecta a capas más amplias de la población y con diferentes condiciones socioeconómicas".
En ese sentido, ha apuntado el cambio que se ha producido en el perfil de las personas desahuciadas, ya que, mientras en 2013 la mayoría de los desahucios eran a personas con hipoteca (14 frente a siete), en 2024 la mayoría son a personas en situación de alquiler, de 233, 210. Además, ha precisado que estos datos "tampoco son el reflejo de la realidad de Bilbao, ya que solo recogen los desahucios que han pasado por el servicio municipal".
"Todas las semanas se dan desahucios en Bilbao", ha destacado, para añadir que en muchos casos, son "silenciosos". "Se trata de familias que viven en régimen de alquiler y que, al ser desahuciadas, pasan a otras viviendas también en régimen de alquiler, pero en situación más precaria, viviendas compartidas por diferentes familias, con o sin contrato, en el que toda la familia vive en una habitación con derecho a baño y cocina compartida. Es lo que se hace llamar el “chabolismo vertical", ha detallado.
En este contexto, Del Río ha afirmado que la lista para acceder a una vivienda "crece cada mes, con 29.607 personas que solicitan vivienda en Bilbao, 23.023 en régimen de alquiler". "En esta situación hay que denunciar las mafias establecidas en la ciudad que hacen negocio mediante el subarrendamiento de habitaciones sin contrato o la cesión de inmuebles en situación irregular previo cobro de cantidades abusivas. Esta práctica es habitual y conocida por la propia administración", ha advertido.
Planificar recursos ahora insuficientes
Por su parte, Karlos Renedo ha afirmado que la situación "es compleja y la casuística cada vez más variada", por lo que “los recursos con los que cuenta actualmente el Gobierno municipal no son suficientes para hacer frente a esta grave situación". Por ello, a su juicio, "urge la revisión de los instrumentos que disponemos", y, en ese sentido, EH Bildu solicita que se abra un proceso para la revisión del actual protocolo municipal frente a desahucios de la mano de los agentes implicados.
Esta revisión, según ha subrayado Renedo, "debe servirnos para realizar un diagnóstico en profundidad con el objetivo de conocer la fotografía exacta de la realidad que se vive en Bilbao". Asimismo, ha explicado que debe servir "para mejorar los mecanismos de detección rápida del problema, volver a acordar los procesos de acompañamiento a las personas que viven situaciones de desahucio y establecer la respuesta municipal para proteger a los colectivos vulnerables y especialmente a familias con menores a su cargo".
Otro de los objetivos de esta revisión es "mejorar la coordinación, por una parte, entre las propias áreas del Ayuntamiento y, por otra, de éstas con el resto de agentes implicados, especialmente sindicatos y entidades del tercer sector". Pero, sobre todo, Renedo ha destacado que "es necesario planificar los recursos tanto humanos como habitacionales, dimensionarlos correctamente y dotarlos del presupuesto necesario, ya que en estos momentos el dinero y recursos destinados a este ámbito son claramente insuficientes y las necesidades de tipología habitacional han cambiado".
Desde el grupo municipal de EH Bildu, plantearán iniciar esta reflexión en primer lugar en el organismo de Viviendas Municipales, que es el que aprobó el anterior protocolo, pero su intención es trasladarlo tanto al área de acción social como otras áreas municipales.
"Somos conscientes de la complejidad del problema, por ello pedimos altura de miras y, por nuestra parte, tendemos la mano a trabajar con responsabilidad para acordar, entre todas, las medidas necesarias para poner freno a esta problemática y que no vaya a más", ha concluido Renedo.