AKTUALITATEA


| 2020-04-16 12:13:00

EH Bildu ha calificado de “totalmente irresponsable” la propuesta del Gobierno Foral del PNV de paralizar las negociaciones con EUDEL y prorrogar una vez más la aplicación de la Ley de Servicios Sociales. Esa es la propuesta que el Diputado Foral de Servicios Sociales, Emilio Sola, ha remitido a la Comisión Territorial de Eudel que se ha reunido esta mañana. Esta nueva prórroga afecta a los servicios sociales de titularidad municipal (viviendas comunitarias y, CRADs, centros rurales de atención diurna) en aquellos municipios de menos de 20.000 habitantes. La citada prórroga tendrá una duración de seis meses, hasta diciembre, y por primera vez EUDEL ha reclamado un calendario de trabajo para negociar con el Gobierno Foral los pormenores del acuerdo.

 

Cuatro años después de la aprobación del Decreto de Cartera, en junio de 2020 expira el plazo para acordar una fórmula para la gestión de estos servicios básicos. Según ha recordado la alcaldesa de Asparrena, Txelo Auzmendi, “en el seno de EUDEL, tras más de un año de trabajo ya hemos consensuado una fórmula de gestión; ahora sólo falta su ratificación por parte de la Diputación Foral de Araba y acordar las fórmulas de financiación”.

 

Se trata de una gestión mancomunada, un novedoso modelo que ya está contemplado en la Ley de Instituciones Locales de Euskadi (LILE) pero no ha sido desarrollado aún. Se denomina “Red de Cooperación Local” tiene carácter de Entidad Local y es una fórmula mancomunada de gestión que puede incluir entre sus miembros a cualquier institución implicada.

 

 

Por esa razón, EH Bildu considera que recurrir a una nueva prórroga sin intentar agotar el plazo trabajando evidencia “incapacidad” e “irresponsabilidad” por parte del Gobierno Foral. Por si fuera poco, la Diputación Foral de Araba recurre a la situación de emergencia sanitaria derivada del COVID 19 para proponer esa nueva prórroga cuando, precisamente, la pandemia ha demostrado las carencias en la prestación de los servicios sociales. “Durante las últimas semanas hemos visto que los servicios sociales estaban desbordados, que su gestión era caótica y que había una evidente falta de material y personal para atender las necesidades más básicas. Esa crisis también ha demostrado que desde la cercanía, los Ayuntamientos hemos sido capaces de responder con mayor agilidad a esas necesidades sociales”, ha añadido Auzmendi.