AKTUALITATEA


| 2021-11-16 14:55:00

La consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, somete hoy a debate en el Parlamento el Plan de Desarrollo Industrial e Internacionalización 2021-2024 del Gobierno, que EH Bildu ha solicitado que sea retirado por ser “profundamente decepcionante”. A juicio de Iker Casanova, “el plan ni fija unos objetivos aceptables para el desarrollo de la industria vasca, ni plantea dinámicas de transformación industrial en la dirección necesaria; falla en lo cuantitativo, lo cualitativo y lo organizativo y repite los mismos tópicos de los últimos años y las mismas políticas que han llevado a debilitar nuestro tejido industrial y a que la industria haya perdido peso progresivamente en el PIB de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa”.

El parlamentario de EH Bildu sostiene que con su plan Lakua renuncia a que la industria tenga más peso en el PIB después de años de paulatino debilitamiento. “Camufla esa tendencia decreciente detrás de un nuevo indicador, industria más servicios avanzados, lo que no es sino una estrategia para ocultar que la industria pierde cada vez más peso en nuestra economía”.

Asimismo, el plan del Ejecutivo “carece de ambición en el ámbito de la I+D, donde está el futuro de la industria vasca para poder competir en dinámicas globales, ya que renuncia al objetivo de que la inversión en I+D llegue al 3% del PIB, que es lo que recomienda la Unión Europea”.

Frente al plan de Lakua, Casanova aboga por “un nuevo modelo industrial que tenga carácter de país y sea social, igualitario, tecnológico, ecológico y eficiente, factores todos ellos que han de conjugarse para construir la industria vasca del futuro; hace falta un nuevo impulso a la política industrial sobre unos nuevos ejes y objetivos, con mayores recursos y más ambición”.

Con este horizonte, EH Bildu ha puesto hoy sobre la mesa 67 propuestas para lograr, entre otros objetivos, que la industria recupere el peso perdido en los últimos años y vuelva a suponer el 28% del PIB, como en 2008, y que la inversión en I+D alcance el 3% del PIB.

Las propuestas de la coalición también contemplan, entre otras cuestiones, la derogación de la reforma laboral, la creación de un fondo de público de inversión dotado con 800 millones de euros para facilitar la participación pública en empresas estratégicas a fin de garantizar su arraigo en el país, un plan de descarbonización de la industria y numerosas medidas para mejorar las condiciones laborales en el sector.