AKTUALITATEA

| 2020-08-12

Durante estas últimas semanas en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa estamos asistiendo a una escalada de las consecuencias sanitarias de la pandemia.Los rebrotes se suceden en diferentes localidades de nuestro territorio. Los rebrotes, las declaraciones alarmistas de los portavoces políticos e institucionales y la no asunción de responsabilidades y su consiguiente falta de medidas para hacer frente a esta situación está provocando un gran nerviosismo e inestabilidad entre la ciudadanía vasca.

Los vascos y las vascas están preocupadas ante lo que están viendo. Es la ciudadanía vasca la primera que observa que nuestro sistema de salud público está saturado y sobrepasado por la situación. “Y esto no se produce por la falta de profesionalidad y atención por parte de las y los sanitarios de Osakidetza. Llevan meses que lo están dando todo; están trabajando por encima de sus capacidades físicas y psicológicas. Y las consecuencias ya se están notando”, ha afirmado la portavoz parlamentaria de EH Bildu Maddalen Iriarte..

Es en la atención primaria donde más claramente se observan las deficiencias. Las y los profesionales de la atención primaria llevan meses demandando respuestas a su situación: exceso de trabajo por la falta de recursos humanos, falta de material, no se producen sustituciones a consecuencia de bajas laborales... “Las y los profesionales de la atención primaria están sobrepasados”, ha subrayado Iriarte. Estos últimos meses de pandemia han agravado una situación que era ya difícil. El que muchos profesionales sanitarios de la atención primaria se hayan visto obligados a coger vacaciones en el periodo estival conla previsión de que el otoño y va a ser mucho más complicado ha llevado a que la situación en muchos ambulatorio sea crítica.

Las y los profesionales sanitarios están sobrepasados. No llegan a hacer todo el trabajo que tienen. Demandan recursos humanos y materiales para poder hacer su trabajo. Y las consecuencias de esta situación la sufre ahora la ciudadanía: listas de espera, no poder ver a su médico y atención vía telefónica... Es una situación límite que urge una respuesta desde nuestros responsables institucionales.

EH Bildu insta a Urkullu a no escudarse en medidas y soluciones que no son de su competencia y a utilizar sus competencias sin más demora. “Es hora de ponerse el buzo y trabajar para buscar soluciones. Un país como el nuestro no se merece una sanidad pública sobrepasada y con unos profesionales que se encuentran al límite. Son estos profesionales de la atención primaria la primera línea de frente para paliar las consecuencias sanitarias de la pandemia”, ha dicho Iriarte. “La primera oleada nos enseñó que la sanidad y educación son elementos a cuidar y salvaguardar ante cualquier cosa. Si este país y sus representantes institucionales han aprendido aquella lección, es hora de ponerse manos a la obra. Sin excusas”.

EH Bildu considera que la pandemia y sus consecuencias requieren una respuesta como país. Las consecuencias sanitarias y económicas que está provocando el Covid-19 necesita buscar soluciones de manera conjunta. La izquierda soberanista lleva meses solicitando a Urkullu más diálogo y el trabajo conjunto de los agentes políticos, sindicales, económicos y sociales del país. “Nuestro sistema sanitario público, la educación y el inicio del curso político y el resto de los pilares de nuestra sociedad no pueden esperar más. Es hora de trabajar y de hacerlo de manera conjunta. Cada cual desde su posición y desde las responsabilidades que tiene, pero todos y todas podemos aportar ante esta situación. Así lo ha hecho antes este país y creemos que esta es la mejor manera de hacerlo”, ha señalado la portavoz de EH Bildu.

Ante el desarrollo de la pandemia, ante el aumento de casos, la sociedad vasca necesita medidas eficaces para reconducir, controlar y suavizar la situación. En palabras de Iriarte, “la ciudadanía vasca necesita seguridades ante esta situación de incertidumbre”. Necesitamos pedagogía para que la gente entienda bien lo que está pasando, tomar conciencia de la situación y asumir también la responsabilidad de la situación de forma individual y colectiva. Para ello necesitamos medidas claras, razonables, eficaces y coherentes. Todavía no hemos visto nada de eso. Ahora toca cuidarnos y protegernos mutuamente, la comunidad es la vacuna más eficaz en este momento, pero eso exige pedagogía y transparencia. Ahora toca trabajar a mano con los agentes y partidos que forman esta comunidad.